Claudia gana, pero pierde a su Consejero Jurídico
Claudia Sheinbaum será la próxima presidenta de México para el periodo 2024-2030; sin embargo, durante la carrera electoral perdió a uno de sus incondicionales: Arturo Zaldívar.
El golpe letal lo dieron cuando uno de los cercanos a la primera mujer que encabezará al Poder Ejecutivo, confirmó que existían pruebas que delatarían la participación de los operadores del exministro en asuntos que se confabularon para presionar a jueces con la intención de hacerse de recursos millonarios a favor de terceros.
La historia tuvo varios capítulos. Cuando se hizo pública una denuncia anónima que involucraba al expresidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en distintos casos de corrupción, el apoyo para Zaldívar fue honesto e integral para que no se preocupara, pues sabían que se trataba de grupos de poder que buscaban debilitar a quien se creía sería el próximo Consejero Jurídico de la presidenta.
Sheinbaum Pardo arropó a Zaldívar y jamás le perdió la confianza, pero sabe que los cercanos al fan de Taylor Swift están inmiscuidos en escándalos. Por lo mismo, y pese a la cercanía, hoy podemos asegurar que el swiftie del poder judicial, así como no fue estelar en los eventos de campaña, tampoco arribará al puesto que tanto aspiraba.
Pero la batalla tiene nombre y apellido. Entre los cercanos de la ganadora de la elección presidencial, consideran que estos ataques vienen del grupo político que controló o tuvo amplia cercanía con la Suprema Corte de Justicia de la Nación desde el sexenio de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
Y es que este grupo buscaba colocar a Salvador Nava, quien en su faceta de nuevo chairo, tenía el apoyo de varios topos panistas que se incrustaron en la 4T para rescatar algo del poder que ostentaban en otras administraciones.
Nava Gomar fue magistrado de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación de 2006 a 2016, se sabe que es cercanísimo del exsecretario particular de Calderón, Roberto Gil Zuarth, y uno de los defensores de México Libre, la organización política de Felipe Calderón y Margarita Zavala. Además, fue el representante jurídico de Pío López Obrador ante el TEPJF.
La presidenta electa se enteró de estas luchas y ataques orquestados, por lo que dio la indicación de platicar con Arturo Zaldívar para reiterarle su apoyo y que se concentrara en la campaña como uno de los voceros más sobresalientes. Sin embargo, la distancia y el tiempo confirmaron que el exministro sería un alfil que se sacrificaría para que no atacaran a la entonces candidata. El tema ha llegado a escalar tanto, que Zaldívar, a pesar del aprecio, se ha convertido en un lastre para la 4T.
Entre los morenistas y en Palacio Nacional aún hay admiración y confianza hacia Arturo Zaldívar, quien no dudó ni un minuto en mantenerse en la línea de batalla. Sin embargo, no debemos perder de vista que en la SCJN no pararán en acorralar al exministro, por lo que los ataques subirán de tono por las presiones que supuestamente ejerció su equipo hacia varios jueces.
En tanto, Salvador Nava se hizo pequeño en esta confabulación orquestada desde el escritorio de Norma Piña y sus amigos, quienes saben que será una batalla épica contra el Ejecutivo y Legislativo durante los próximos seis años.
Y para los incrédulos, en una oficina ubicada en la calle de Lafontaine, Salvador Nava creía que desde allí le alcanzaría para llegar a la Consejería Jurídica; sin embargo, se le olvidó que muchos desconfiados comenzaron a investigar sus nexos y cercanías, las cuales son más que panistas con tintes de coyotes para asuntos jurídicos-electorales.
MADRUGUETE
TABOADA PIERDE Y LO SABÍA
Santiago Taboada tenía como encuestadora de casa a Lorena Becerra, quien sorprendentemente en los últimos tres meses no hizo pública ninguna muestra de las tantas que le solicitaron sus clientes privados y personajes políticos. Directivos de otras casas encuestadoras afirman que los números jamás le dieron para situar al candidato del PAN-PRI-PRD con una ventaja mínima, por lo que los asesores optaron por esperar al 2 de junio, donde aspiraban a que se presentara un resultado inédito como el triunfador de los comicios para jefe de gobierno de la CDMX.
Los pronósticos fallaron y ahora se avecina una avalancha de acusaciones entre los cercanos al güero Taboada, ya que con tal de quedar bien con su jefe le mostraban datos que no correspondían con la realidad. Por lo mismo, deberían de aprender de Lorena Becerra, quien siempre optó por hablar con el dato duro sin alterar ningún resultado y sin pensar en quedar bien con los jefes de la campaña. Y no crea que nos referimos a Roberto Gil Zuarth, Germancito Martínez, Rafa Giménez, Liévano Sanz, Marianita Gómez del Campo, Fausto Muciño, Juan Ignacio Zavala, Rafa Giménez, Héctor Villareal, Federico Döring, Claudia de Buen, Manuel Mondragón y Kalb y Marcela Gómez Zalce.
Aunque debemos darle mención especial al güero Taboada, quien como buen demócrata reconoció el triunfo de Clara Brugada. Santiago resultó ser un político de los que tanto anhelaba el PAN.