Reconocimiento. Son 5 etnias indígenas las que conviven en la entidad: tepehuanos, mexicaneros o náhuatl, huicholes, coras y tarahumaras o rarámuris.
En el marco del 9 de agosto, Día Internacional de los Pueblos Indígenas, se llama a proteger los derechos de los pueblos originarios al ser portadores de sabiduría ancestral, herederos de la resistencia y orgullo cultural.
De acuerdo con los resultados del Censo del 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en Durango se reconocieron como población indígena 58 mil 286 personas.
De esa cifra, 29 mil 414 eran mujeres y 28 mil 872 hombres; en cuanto a la población hablante de lengua indígena, en el 2010 eran 32 mil 917 personas y en el 2020, 47 mil 242.
Del total de esa población para el 2010, 5 mil 949 no señaló no hablar español y en el 2020, 8 mil 515 personas manifestaron no hablarlo.
Conviven cinco etnias indígenas en la entidad: tepehuanos, mexicaneros o náhuatl, huicholes, coras y tarahumaras o rarámuris.
PLAN DE JUSTICIA
Durango es una de las 12 entidades que forman parte de los 17 planes de justicia que hay en el país para reconocer los derechos de los pueblos originarios, como acto de justicia social.
En los planes de justicia y desarrollo Integral de los Pueblos y Comunidades Indígenas, incluyen 23 etnias y más de 420 mil personas en el país.
AUTORIDADES TRADICIONALES
La planeación de lo que requieren en cada comunidad se lleva a cabo por las Autoridades Tradicionales por medio de sus propias formas de gobierno y mecanismos de toma de decisiones.
Mientras que el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) apoya a las autoridades tradicionales a desarrollar sus diagnósticos regionales, con los planteamientos más importantes para su bienestar y justicia.
El Plan de Justicia debe aportar en la mejora de condiciones de vida regional comunitaria y a que se resuelvan temas donde han existido agravios históricos.
ASAMBLEA NACIONAL
Entre las acciones que se realizan para conmemorar esta fecha se realizó una Asamblea Nacional en la Ciudad de México, en donde participó una comitiva de autoridades tradicionales de Durango y autoridades del INPI.
En la asamblea se hizo un llamado al Congreso de la Unión para que, en un alto sentido de responsabilidad histórica, aprueben en septiembre la reforma constitucional sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y Afroamericanos.