Extra. Cada noche, mientras cerramos los ojos, nuestro cuerpo se embarca en un proceso rejuvenecedor.
Sumergirse en un sueño reparador no es solo un lujo, es una necesidad imperativa para el bienestar integral. El descanso no solo ofrece un alivio merecido al final del día, sino que se revela como un pilar fundamental para mantener la salud física y mental.
Cada persona experimenta picos de energía y momentos de sueño según su cronotipo, influenciando la actividad y preferencias diurnas o nocturnas. Interpretar el cronotipo no solo revela momentos de mayor productividad, sino también cuándo es ideal descansar, mejorando así la calidad del sueño.
CRONOTIPOS: ¿LOBO, LEÓN U OSO?
Según el Instituto Internacional de la Melatonina (IiMEL), los cronotipos humanos se dividen en tres categorías:
- Matutino: Quienes se acuestan temprano y son más enfocados por la mañana (25% de la población).
- Vespertino: Personas más productivas por la tarde y noche, con un horario de sueño entre las 3:00 a. m. y las 11:00 a. m. (25% de la población).
- Intermedio: El 50% restante, adaptándose tanto a madrugar como a acostarse tarde, con un periodo de sueño de 00:00 a 8:00 a. m.
Comprender tu cronotipo es descifrar tu reloj biológico, permitiéndote optimizar tus rutinas para aprovechar al máximo las horas más productivas y los de descanso.
¿CUÁL ES EL MEJOR HORARIO?
Según un estudio en el European Heart Journal-Digital Health, dormir entre las 10:00 p. m. y las 10:59 p. m. podría reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.