Tendencia. La llegada de Hamilton a Ferrari ha provocado un terremoto en el automovilismo al apostar por una marca registrada que factura millones.
Sir Lewis Hamilton es más que un piloto. Es un 'icono trendy'. Viste Prada y Versace. Las marcas de ropa se lo rifan. Tiene una colección con Tommy Hilfiger. Acude a la gala MET. Se pasea en el 'paddock' con su bulldog vegano 'Roscoe'. Pelea contra el racismo en la F1 o se sienta en el famoso sofá del glamuroso programa de Graham Norton en la tele, al lado de Kylie Minogue, Ricky Gervais o Elizabeth Banks. Su fichaje es mucho más que una decisión deportiva para Ferrari. En el fútbol dirían de él, al estilo Beckham, 'que vende camisetas'.
Es por eso que la llegada de Hamilton a Ferrari en 2025 ha provocado un terremoto en el automovilismo. Ya no solo porque deportivamente sea uno de los movimientos más grandes de la historia de la categoría reina del motor, sino porque a la escudería del "Cavallino Rampante" apuesta por una marca registrada que factura millones de euros al año como estrategia para catapultarse de nuevo a lo más alto.
UN FICHAJE DE 40 MILLONES
La escudería más laureada de la historia se ha encontrado con el piloto más determinante de la última década. Una alianza que va más allá de lo deportivo para Elkann, el presidente de Ferrari, y que significa una inversión de más de 40 millones de euros para el salario de la estrella inglesa.
John Elkann, de 46 años, es un Agnelli con apellido estadounidense -nieto del magnate Gianni y primo de Andrea, el ya expresidente del Juventus- y uno de los empresarios más importantes de Italia. Es el presidente de Ferrari y el director ejecutivo de Exor, el 'holding' de la familia Agnelli que controla el Juventus.
Y el máximo responsable de Ferrari quiere volver a colocar su marca por todo lo alto tras unos años alejado del éxito. El fichaje de Hamilton catapulta su escudería; asegura pasarelas, moda, novedad, una marca reconocible e ingresos.
Es por eso que la llegada de Hamilton a Ferrari es mucho más que un movimiento deportivo del Agnelli estadounidense. Es una apuesta por una marca. Un trampolín al éxito que, además, asegura experiencia y éxito al volante.
Y de esto, Hamilton y Ferrari, las dos marcas más importantes del mundo de la Fórmula 1, se dan la mano y a partir de 2025, se escribirá una nueva página en la historia del mundo del automotor. La Fórmula 1 sale ganando.