Paciente fue golpeado al interior del Hospital Psiquiátrico de Durango; tiene fracturas en rostro
Un varón fue internado la madrugada del viernes 4 de octubre en el Hospital de Salud Mental de Durango, horas después, el paciente terminó en la Clínica No.1 del Instituto Mexicano del Seguro Social, con aparentes signos de una golpiza.
El paciente, un varón de nombre Juan Carlos "N", tiene diagnóstico psiquiátrico, por tal motivo, fue llevado a recibir atención especializada a dicho centro, en el que, aseguraron, tendría que quedarse por un lapso de 15 días, narran en un texto posteado en redes sociales.
Sin mayor información, el personal del Hospital de Salud Mental Dr. Miguel Vallebueno, ubicado sobre la avenida Fidel Velázquez, de la colonia Veinte de Noviembre, detalló a la familia que, al amanecer del viernes, el varón fue sujetado debido a que presentaba crisis agresivas.
Inicio de un martirio
El sábado 5 de octubre comenzó el martirio para la familia. Durante la madrugada, Juan Carlos fue fuertemente golpeado por otro paciente, quien le fracturó la nariz y parte de un pómulo, sin embargo, el Hospital omitió notificar a la familia de inmediato, denunciaron en redes sociales.
La familia llevó por sus medios al paciente a recibir atención médica a la Clínica No. 1 del IMSS, donde fue diagnosticado con las lesiones antes descritas.
Internado solo con sedantes
Juan Carlos permanece hasta la fecha permanece internado en el área de urgencias, cama 27, donde no se le ha podido realizar la cirugía que requiere.
Familiares narraron que en el IMSS no ha sido intervenido quirúrgicamente debido a los problemas psiquiátricos que padece, donde solo lo mantienen sedado y se encuentra desorientado.
Hospital no aporta evidencias
En una denuncia ciudadana, realizada en redes sociales, familiares aseguran que el Hospital de Salud Mental no ha querido aportar las evidencias de como habrían ocurrido los hechos, por los que Juan Carlos quedó postrado en una cama y con diversas fracturas.
Sumado a la situación, un familiar cercano aseguró, mediante una denuncia ciudadana, que la madre del paciente es una mujer de 81 años, de escasos recursos.
