¿Qué son los 'CETES directo' y cómo funcionan? Aquí te contamos
Los CETES directo son una plataforma digital del gobierno mexicano que permite a cualquier persona invertir de forma sencilla y sin intermediarios en Certificados de la Tesorería de la Federación (CETES), que son títulos de deuda emitidos por el gobierno, los inversionistas prestan dinero al gobierno por un tiempo determinado y, a cambio, reciben rendimientos a través de intereses.
¿Qué son?
Estos son considerados como unos instrumentos de inversión del Gobierno de México con el objetivo de financiar sus proyectos, funcionan como una especie de préstamo en el que el inversor compra un título y, al término de un plazo determinado, el gobierno devuelve el monto inicial más los intereses generados.
¿Cómo funciona 'CETES directo'?
La plataforma fue diseñada para democratizar las inversiones, permitiendo a cualquier ciudadano adquirir estas herramientas sin necesidad de intermediarios, como bancos o casas de bolsa pero sobretodo con una seguridad mayor a la de la competencia.
Para comenzar a invertir solo ocupas registrarte en la página oficial, contar con una cuenta bancaria, y realizar un depósito mínimo de 100 pesos.
Una vez registrada, la persona puede comprar títulos desde 100 pesos y elegir el plazo que mejor se ajuste a sus necesidades. El rendimiento de los CETES varía según la tasa de interés vigente, pero es una opción atractiva por su seguridad y accesibilidad.
Actualmente los plazos y rendimientos en la plataforma son:
Tiempo | Rendimiento |
28 días | 10.51% |
Tres meses | 10.70% |
Seis meses | 10.72% |
Un año | 10.70% |
Además, la plataforma ofrece la posibilidad de reinvertir los rendimientos automáticamente, lo que facilita el crecimiento del capital a largo plazo. CETES directo es una herramienta útil para quienes buscan una inversión segura, sencilla y de bajo riesgo.
¿Por qué es una opción "segura"?
CETES Directo la opción más confiable dado a su respaldado por el gobierno mexicano, lo que implica un riesgo muy bajo de impago, ya que se considera que el Estado tiene una alta capacidad para cumplir con sus obligaciones financieras, sin embargo no pueden garantizar rendimientos específicos porque estos dependen de las tasas de interés que determina el mercado y el Banco de México, las cuales pueden variar debido a factores económicos como la inflación, la política monetaria, etc.