Regresa afectación del gusano descortezador en la sierra de Durango
Hasta ahora, por la falta de agua en la sierra y el estrés hídrico del arbolado, se detectó la plaga del gusano descortezador y defoliador, en ocho mil 748 hectáreas de al menos cuatro municipios.
De acuerdo con la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente, la sequía atípica que se viene presentando en Durango desde 2022 y 2023, aunado a los cambios en los patrones de precipitación y las altas temperatura, pudieran detonar que los insectos en el bosque se conviertan en plaga por el aumento de sus poblaciones en este primer semestre del 2024.
Claudia Hernández Espino reconoció que en el estado se tienen reportes de la presencia de plagas de gusanos descortezadores y defoliadores, así como de plantas parasitas (muérdagos), sin que sean un problema difícil de atender todavía.
REPORTES POSITIVOS DE DUEÑOS DEL BOSQUE
Explicó que, en 2023, se recibieron 107 avisos de dueños de bosque sobre plagas o enfermedades forestales, de los que solo en 106 predios se encontró plaga presente.
La superficie afectada en esos 106 predios es de ocho mil 688.48 hectáreas, y se han emitido 107 notificaciones para su respectivo tratamiento.
En este 2024 se han recibido 11 reportes más de la presencia de posible plaga y solo en 10 se ha confirmado, con una extensión de 60.7 hectáreas por lo que hasta ahora se están tratando ocho mil 748 hectáreas de bosque con plaga.
EN TRATAMIENTO 110% MÁS QUE UN AÑO NORMAL
Si bien, todavía no se puede considerar un problema difícil de atender, en la comparación anual, durante el año 2022 se detectaron tres mil 974 hectáreas con plaga en el bosque duranguense, por lo que se tiene en estos momentos en tratamiento un 110 por ciento más de lo que se trata en un año normal.
Ante este crecimiento de la plaga en el bosque, Hernández Espino señaló que es importante fortalecer el programa de Sanidad Forestal para mantener la salud del bosque, la capacidad productiva y reducir el riesgo de contingencias fitosanitarias.
“Podemos elevar la calidad de vida de los propietarios y poseedores del recurso forestal por medio de una buena prevención, control y combate de plagas y enfermedades forestales mediante la coordinación institucional y la aplicación de la normatividad vigente y apegados a los principios de ley” aclaró la titular de la SRNyMA.
CONTEXTO
En el año 2012 y 2013 se presentó en Durango una contingencia de sanidad provocada por el gusano descortezador que obligó al derribo de más de tres millones de árboles en el bosque duranguense.
Se gastaron para controlar la plaga más de 72 millones de pesos y se vieron afectadas más de 65 mil hectáreas de bosque, sobre todo en los municipios de San Dimas, Pueblo Nuevo y Durango.
Actualmente no se cuenta con información del comportamiento previo a esa contingencia, pero se prevé que fue el estrés hídrico provocado por la falta de agua en las zonas forestales del año 2011 lo que detono esa contingencia.
Pero los gusanos descortezadores no son los únicos organismos que afectan los bosques. Estos son otros insectos y patógenos que ponen en riesgo las áreas forestales.
Los descortezadores son organismos que se desarrollan bajo la corteza de los árboles, debilitándolos y provocándoles la muerte, se trata de una de las plagas más peligrosas para los bosques, porque le ocasiona daños que pueden afectar desde un pequeño grupo de árboles hasta cientos o miles de hectáreas.