2025 y más allá

Primero es lo primero: gracias por leerme al menos una vez, durante los casi dos años que llevo escribiendo esta columna. Después, desearles mucha salud, éxitos, bendiciones y que todas sus esperanzas para este año 2025 y el futuro se hagan realidad.

Esta semana también recibimos la visita de unos Reyes Magos, más magos que reyes, pues para traer oro a 2,700 dólares la onza, seguro que Melchor empeñó la yegua con todo y silla, Gaspar tuvo que salvar muchas aduanas para llevar el incienso, que fue comparado y equiparado con alguna sustancia tóxica, y de no ser por el poco dinero que llevaba para estos menesteres, casi termina en prisión y sin fianza. A nuestro moreno Baltazar le fue peor: no solo el turbante y el color, sino su apellido Al-Ahmed, fue un obstáculo para sortear la aduana de los Estados Unidos, donde le confiscaron su mirra, pues ya estaba en la lista de polvos terroristas y lo detuvieron un buen rato hasta probar que ese material no explotaba, y lo más tardado fue regresar a su camello, que ya estaba rumbo al zoológico de San Diego en California. Pero llegaron a tiempo a entregarlos al Niño Jesús.

El problema se suscitó en algunas naciones muy "rey-magueras" como España y México, que esperaban mejores regalitos de partes de esta realeza, y no contaron con el hecho de una "devaluacioncita", incertidumbre y bajo crecimiento mundial el año pasado, que resultó en un mayor costo logístico para los Reyes. Yo me conformo con más paz y tranquilidad, aunque un saxofoncillo nuevo no estorbaría.

Pasado este paquete de fiestas, que afortunadamente a un buen porcentaje de personas nos proporcionó una pausa para reflexionar, procedo a compartirles mis predicciones para este año, todo con el objeto de que hagan ustedes un ejercicio similar, y vayan poniéndole palomas o tachas a sus aciertos y yerros.

1.- Nuestros vecinos NO podrán deportar a 11 millones de indocumentados (de los cuales 4 millones son mexicanos) y la cifra no pasará de 50 mil compatriotas en 2025. (Aunque las notas digan que un millón, chequemos los datos duros).

2.- Las negociaciones del T-MEC iniciarán y llegarán al 2026 con acuerdos diferentes a lo que pensamos, pero justos para ambas naciones (miedo de las partes por "regarla" y afectar su economía). En el proceso de las pláticas, mejorará nuestra percepción de inseguridad.

3.- Nadie nos invadirá y "masiosare" seguirá degustando mezcal de Nombre de Dios, Durango.

4.- Día tras día, apreciaremos más a Mr.Trump y valoraremos con mayor objetividad sus amenazas y estrategias.

5.- La guerra en Ucrania, lamentablemente, continuará, pero con un Putin más controlado por el costo y la popularidad en Rusia. (Ya le pusieron un tapón a su gasoducto a Europa, en Ucrania)

6.- El déficit fiscal de México NO bajará al 3.5% del PIB como lo pretende el presupuesto 2025, pero bajará entre 1-3% para poder conservar la actual calificación crediticia BBB+ estable.

8.- Pemex y CFE, por fin, aunque "a la sorda", aceptarán socios privados, pues no pueden solos con la demanda. Como muestra: el 70% del gas natural que necesitamos viene de los EE. UU. y con este gas operamos las plantas generadoras de energía de ciclo combinado.

9.- Aunque se predice un 1.2% de crecimiento del PIB en México para 2025, el más bajo de Latinoamérica, el Gobierno modificará sus reformas para mejorar nuestra generación de riqueza. (Ja, ja, ja. Aunque todo es posible, y yo no pierdo la esperanza).

10.- El América será tetracampeón e iniciará el proyecto 4C, para competir con la 4T.

Enfrentemos este 2025 de riesgos y oportunidades con determinación y alegría. No hay de otra. ¡Viva México!

Ánimo.