La colitis, además de estar relacionada con problemas alimenticios, tiene un vínculo con las emociones.
Algunos síntomas relacionados con la colitis o inflamación del intestino grueso son: dolor, distensión abdominal y alteraciones en las evacuaciones, como diarrea o estreñimiento.
Esta enfermedad puede desencadenar irregularidades en los hábitos de evacuación, dolor e inflamación que empeoran con la alimentación, evacuaciones con moco, ansiedad, depresión, irritabilidad, trastornos en el estado de ánimo o trastornos del sueño.
Asimismo, el padecimiento tiende a afectar más a la población femenina y se presenta con mayor frecuencia entre los 30 y 50 años de edad.
Lamentablemente, 75% de los pacientes no acude al médico porque considera que sólo se presenta al sufrir estrés o ansiedad.
El cambio de hábitos alimenticios, realizar actividad física y la valoración médica ayudan en el tratamiento para aliviar la sintomatología de la colitis, también llamada colitis nerviosa.
TRATAMIENTO
Es indispensable no ingerir cierto tipo de alimentos que agravan los síntomas como la cafeína, grasas, huevo, leche, frijol, habas, col y coliflor, entre otros.
También, se recomienda comer porciones más pequeñas e incrementar la fibra en la dieta diaria.
Un médico debe determinar si existe algún trasfondo psicológico, debido a que es probable que la colitis esté relacionada con una problemática complicada.