Francisco Nava Rodríguez |
El Siglo de Durango
“Los índices de crecimiento de pobreza en Durango son responsabilidad de la Secretaría de Desarrollo Social y no del gobierno estatal, ante la rigidez de sus reglas de operación que impiden a sus delegados la capacidad de decisión”, explicó Wilfredo Salas García, coordinador general del Comité de Planeación para el Desarrollo del Estado (Coplade), quien calificó a las dependencias federales como rígidas, centralistas y antifederalistas.
En la comparecencia que realizó ante el Congreso del Estado hace unos días, el funcionario mencionó que Durango ha crecido en pobreza. Del lugar número 14, en el que se ubicó en 1998, al lugar 18 en el 2003.
Señaló que el aumento de la pobreza en Durango obedece a la rigidez de las reglas de operación de las dependencias federales que se han transformado en centralistas. “Sedesol como otras dependencias se están convirtiendo sólo en receptoras de información y se encuentran con incapacidad de decisión, pues todo se determina en la Ciudad de México”.
La dependencia federal informa que tiene capacidad de atención de 58 mil familias en el estado. Wilfredo Salas, ex delegado de la Sedesol, informó que en el 2000 él dio a conocer cifras de pobreza en el estado que alcanzaron las 75 mil familias y reconoció en su periodo que se tenía capacidad de atender a 32 mil, menos de la mitad.
Los datos que da a conocer la Sedesol a través de los “cuadernos de desarrollo humano” indican que un 10.9 por ciento de los hogares en el estado son pobres, el 62.5 por ciento se presenta en las viviendas del medio rural.
Dijo que la información del lugar que ocupa Durango con relación a la población que es pobre lo determina la misma Sedesol, así como las estadísticas que menciona el Consejo Nacional de Población y el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e informática, todas ellas dependencias federales, por lo que deslindó al gobierno estatal del problema. “Los programas de combate a la pobreza son federales, no estatales, y la responsabilidad recae en ellos”, indicó.
Señaló como incongruente que Josefina Vázquez Mota, secretaria de la Sedesol, afirme que la pobreza ha disminuido cuando los números estadísticos reflejan lo contrario.
Los impedimentos de negociación para la planeación y la solución de la pobreza en Durango, entre Sedesol y Coplade, han delimitado las líneas de acción y ha repercutido en la obstaculización de entrega de recursos en las zonas de conflicto. Los lineamientos de Sedesol marcan la aplicación de los recursos sólo en ciertas franjas urbanas, cuando las necesidades de atención indican que debe realizarse también en las zonas rurales.
El funcionario señaló que la política centralista está en contra del federalismo que se signó en 1977 y está retrasando los convenios que ya se habían logrado. El Convenio de Coordinación para el Desarrollo Social y Humano 2003 fue rescatado por el Coplade.