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Santa María del Oro, una tierra generosa

Javier Guerrero Romero

Para Mayela del Carmen

A ciencia cierta se desconoce con precisión la fecha de fundación de Santa María del Oro, los diferentes cronistas y documentos coinciden, sin embargo, que la población ya existía en la primera mitad del siglo XVIII, aunque se ha llegado a asegurar que incluso podían haber existido algunos caseríos a fines del siglo XVII.

La fundación formal del centro de población como una asentamiento español parece que ocurrió el 14 de agosto de 1758, a partir de la donación que hicieran don Pedro Manuel de Acosta y su esposa María Nicolasa Rubia, de las tierras necesarias para la fundación del pueblo de Nuestra Señora de las Mercedes de El Oro, realizada desde 1737.

El descubrimiento de las minas de oro de la región hizo que la población pronto adquiriera gran importancia y se establecieran en ella numerosos colonizadores. Para fines del siglo XVIII la iglesia tenía ya la categoría de Parroquia, de hecho, los primeros registros parroquiales que se conservan datan de 1770.

La riqueza y fama de sus minas hizo que en varias ocasiones fuera asediada la población por indígenas desplazados del norte, como los apaches que aún en el siglo XIX asolaron la región.

Por su ubicación, Santa María del Oro pronto se convirtió, y lo sigue siendo, en el centro económico de toda la región norte de Durango.

NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES

La iglesia parroquial de Santa María del Oro alberga uno rico tesoro colonial del siglo XVIII, en su interior se conservan importantes obras de arte.

El templo actual se encuentra erigido justo en el lugar donde si inició la edificación primitiva del Templo de Nuestra Señora de las Mercedes, realizada por frailes mercedarios, quienes se asentaron en el norte de la Nueva Vizcaya a partir de mediados del siglo XVIII.

El templo posiblemente date el inicio de su construcción hacia 1758. Luego fue modificado en el siglo XIX y transformada su decoración interior del estilo Barroco al Neoclásico, estilo arquitectónico entonces en boga. En el siglo XX se realizaron nuevas mejoras al edificio.

En el altar mayor del templo, de estilo Neoclásico, se encuentra una hermosa imagen de la Virgen, en su advocación de Nuestra Señora de las Mercedes. Se trata de una escultura encarnada en madera, de factura espléndida, que engalana por sí misma el espacioso altar mayor. Posiblemente se trate de una talla realizada en el siglo XVII por el escultor Juan de Sepúlveda y traída a esta población hacia 1625 por los padres Nicolás de Estrada y Guillermo Solier.

RETABLOS DE ESPLENDOR

En una capilla lateral se conserva, casi completo, un monumental retablo de madera del siglo XVIII, dedicado a Nuestra Señora de la Merced. Posiblemente se trate del retablo barroco más grande conservado en la actual diócesis de Durango.

En el retablo aparece en el nicho superior una monumental pintura al óleo de Nuestra Señora de las Mercedes.

En los nichos laterales se levantan diversas esculturas talladas en madera, las que posiblemente, al ser cambiado el retablo, perdieron su orden lógico, pues ahora no corresponden a un plan icnográfico. El retablo está dedicado a los santos fundadores, apoyados en los pilares de la iglesia.

Entre las imágenes podrá apreciar en la base central una espléndida talla de San Pedro y otra de San Antonio de Padua (fuera de su ubicación correcta). La Virgen es flanqueada por San Agustín, San Ignacio de Loyola, San Ramón Nonato y una imagen que parece ser San Buenaventura.

En las calles laterales podrá apreciar las representaciones de Santa Teresa de Jesús, Santo Domingo, San Pablo, Santa Rita, San Francisco de Asís y otra imagen no identificada.

En la nave central se encuentra al lado izquierdo, otro pequeño retablo barroco en madera dedicado al señor San José, quien se representa en una hermosa escultura tallada en madera, ubicada en el espacioso nicho central. El retablo es coronado por cuatro curiosas y pequeñas imágenes talladas en madera. Se trata de los doctores de la Iglesia San Agustín, San Ambrosio, San Gregorio y San Jerónimo.

RECOMENDACIONES

-Adónde llegar. En la población podrá encontrar diversos hoteles para todos los bolsillos, como en pleno centro, frente a la Plaza de Armas. Aquí encontrará un espacio idóneo para el descanso, con un agradable restaurante, alberca y estacionamiento subterráneo. A un costado de la Parroquia de Nuestra Señora de las Mercedes, contra esquina de la Plaza hay otro lugar agradable y confortable para reposar.

-Para comer. Si desea una comida con el auténtico sabor serrano, en El Oro podrá encontrar pequeños restaurantes, donde se come bastante bien. Los “sapos” es un paltillo típico exquisito, su base en una tortilla de masa gruesa, similar a los sopes, pero guisado en manteca de cerdo, cubierto de guisados basándose en chiles y verduras. El venorio es una especie de mole, muy picante, realizado con venas y semillas de chile rojo, acompañado de nopalitos picados o carne de cerdo en pequeños trozos. Acompañe su comida con un dulce arroz de grano, se trata en realidad de una espléndido atole de grano de trigo, que al degustarse los suaves granos se revientan en una auténtica explosión de sabor.

No deje de comer las deliciosas semitas y “maizcrudos” que se elaboran con una antigua receta, unas de las más exquisitas las podrá encontrar en la calle Juárez. Los marranitos es otro pan dulce maravilloso, hecho con piloncillo, que puede encontrar, en diversos establecimientos.

PARA MUY OBSERVADORES

-En la Parroquia. En la nave central del templo a lado izquierdo podrá reconocer una muy buena pintura al óleo de la Nuestra Señora del Carmen, posiblemente de fines del siglo XVIII, representada en una escena de ánimas.

En el altar de la capilla lateral derecha descubra una extraordinaria pieza labrada de alabastro, que muestra la maestría de los talladores que enviaron piezas a esta región. En la propia capilla lateral derecha podrá descubrir un excelente cuadro al óleo del siglo XVIII que representa a San Francisco de Paula, ¿podrá leer la inscripción que en la parte inferior de la pintura? Se trata de la dedicatoria de quien regaló al templo dicha imagen, el administrador de la Real Renta del Tabaco, Antonio de Sienai Molina.

-En la población. El centro de Santa María del Oro es cruzado por dos pequeños arroyos de aguas intermitentes, que de manera caprichosa se abrieron camino en el terreno, lo cual causa confusión al visitante, puesto que, sin no se sabe, es difícil identificar que se trata de dos cauces. Uno de los arroyos es conocido desde la época colonial como de Agua Buena, y de él se podía extraer agua potable. El otro, conocido como de Agua Mala, se trataba de un cauce en el que se vertían los desechos de la Mina de Magistral, ubicada unos kilómetros aguas arriba y que impedían su uso para el consumo humano por la gran cantidad de minerales y sales que contenía.

TIPS Y SUGERENCIAS

Si requiere información más detallada o necesita orientación, no dude en acudir a la Presidencia Municipal, o a la Biblioteca Pública, allí le informarán y orientarán con gusto.

Erasmo Sáenz Carrete ha publicado algunos trabajos sobre historia de la región. Particularmente le recomendamos su Historia de Santa María del Oro, donde podrá encontrar una completa información sobre este rico mineral y su municipalidad, desde su fundación hasta las épocas recientes.

CAMINO

Cómo llegar

Decida la mejor opción cuando vaya a Santa María del Oro.

*Desde Durango. (Aproximadamente 342 Km.) Tome la carretera 45 con dirección a Parral, aproximadamente en el kilómetro 284 encontrará el entronque a Santa María del Oro, vire a la izquierda unos 58 kilómetros más, y llegará a El Oro.

*Desde Santiago Papasquiaro. (Aproximadamente 177 Km.) Tome la carretera federal 23 en dirección a Tepehuanes, tras unos 52 kilómetros llegará a esa población. Continúe con rumbo a Guanaceví, siga por la misma carretera federal otros 58 kilómetros hasta pasar Ciénega de Escobar; inmediatamente después encontrará la desviación a la derecha, que lo llevará en 67 kilómetros más hasta El Oro.

*Desde La Laguna. (Aproximadamente 263 Km.) Tome la carretera federal 49 con destino a Jiménez, Chih. Al llegar a Bermejillo siga por la carretera federal 30 con destino a La Zarca, siga unos 126 kilómetros para llegar al crucero de la carretera federal 45; tome ésta a la derecha con destino a Parral y siga otros 49 kilómetros hasta el crucero a Santa María del Oro. Gire en este punto a la izquierda y transite los 58 kilómetros que le llevan a El Oro.

*Desde Parral. (Aproximadamente 185 Km.) Tome la carretera federal 45 con destino a Durango, aproximadamente a los 127 kilómetros encontrará el crucero a Santa María del Oro, gire en este punto a la derecha y siga otros 58 kilómetros hasta El Oro.

FUENTE: Investigación Javier Guerrero Romero.

Escrito en: siglo, Santa, María, kilómetros

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