GENERAL SIMÓN BOLÍVAR, DGO.- Por el delito de homicidio calificado, fue consignado al juzgado penal el sujeto que dio muerte a balazos a dos hermanos en el poblado Santa Rosa, municipio de Simón Bolívar.
Como presunto responsable del doble asesinato aparece Jesús Salazar Barrón, de 42 años, vecino del mismo poblado, quien ingresó al Hospital General con dos heridas producidas por proyectil de arma de fuego; una en región maxilar inferior y otra en región dorsal de la mano derecha, ambas sin salida, pero fue dado de alta y enviado al Centro de Readaptación Social (Cereso).
Los occisos llevaban por nombre Guillermo y Benito Romero Vega, de 31 y 39 años, respectivamente, vecinos de Santa Rosa, Durango.
Guillermo presentaba una herida de bala en el costado izquierdo que le penetró el tórax y pulmón del mismo lado, en tanto que a Benito se le aprecia una herida con orificio de entrada en costado izquierdo y salida en costado derecho, con perforación de pulmón y venas pulmonares. Ambos andaban alcoholizados, según el médico legista, Armando Castillo González.
Con las declaraciones de los testigos y el inculpado, se pudo establecer que la tarde del pasado jueves, los hermanos Guillermo y Benito llegaron a la cantina de Santa Rosa, al filo de las seis de la tarde y Jesús se encontraba afuera.
Como ya tenían viejas rencillas, Guillermo salió de la cantina y comenzó a discutir con Jesús y ambos sacaron sendas pistolas y las accionaron.
Jesús recibió dos heridas y Guillermo una en el pecho, por lo cual salió corriendo para tratar de ponerse a salvo, mientras que su rival pensó que no lo había herido, por lo que molesto se introdujo a la cantina y a mansalva disparó contra Benito, que no había intervenido en el pleito.
Al enterarse de lo ocurrido, Elvia Salazar Olvera, esposa de Benito y prima de Jesús, se metió a la cantina y al ver a su esposo malherido pidió ayuda para llevarlo al Centro de Salud de Simón Bolívar y lo mismo hicieron con Guillermo, a bordo de dos vehículos.
Por su parte, familiares de Jesús también lo auxiliaron, pero un sobrino, de nombre Martín y un hermano, conocido como ?El Chino?, fueron a la casa de Benito y Guillermo, donde hicieron varios disparos, pues querían acabar con Jesús, sin saber que ya estaba moribundo.
Al llegar al Centro de Salud de Simón Bolívar, el médico los examinó y les dijo a sus familiares que ya se encontraban muy graves y nada se podía hacer, pues se habían desangrado por las heridas.
El agente investigador del Ministerio Público informa que luego de ser dado de alta del Hospital General de esta ciudad, donde estuvo internado Jesús Salazar Barrón, fue consignado ante el juzgado penal.