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Cecapi festeja 28 años de brindar calidez a personas invidentes

EL SIGLO DE DURANGO

El Centro de Capacitación para Invidentes (Cecapi), instituido en 1980 por Jaime Pérez Calzada y un grupo de voluntarios, hoy cumple 28 años de su fundación. Un camino largo y sinuoso que celebran invitándote a sumar esfuerzos para esta causa.

“Acepten al ciego por su razón de justicia y no de piedad”, dice Pérez Calzada, quien instituyó este centro para atender las necesidades de niños, jóvenes y adultos ciegos y débiles visuales que se encontraban sin hacer algo útil debido a la falta de apoyo.

A través de herramientas como la lectoescritura, el uso y manejo del bastón blanco, la estenografía Braile y tres talleres ejes: Manualidades, Encuadernación y Cocina, estas personas experimentan una evolución en el desarrollo de coordinación motora fina en los dos primeros y su independencia total con actividades de la vida diaria en la tercera.

Actualmente cuentan con un extenso programa para padres de familia y personal docente que pretende incorporar a personas invidentes en actividades comunes como la danza, educación, física, teatro, deportes a nivel competitivo, entre otras.

DIFICULTADES Y GLORIA

En estos 28 años, alumnos con cero escolaridad han logrado integrarse a escuelas regulares y se alistan para ser profesionistas de licenciaturas en Derecho, Comunicación, Ingeniería en Computación, entre otras.

Jaime Pérez Calzada comentó que del Cecapi sale gente muy exitosa: Comerciantes, músicos, masoterapistas, intendentes, ayudantes de cocina, encuadernadores, elaboradores de piñatas, con lo cual se integran al medio ambiente común.

Graciela Cruz Muñoz, directora del Centro, menciona que a pesar de los avances logrados es necesario que aumente la difusión y el apoyo para avanzar en este camino que no termina.

GRAN CORZÓN

Comentó que Édgar Orrante Ramírez, ha colaborado a lo largo de estos 28 años proporcionando atención oftalmológica gratuita y es por personas como ellas que la institución ha logrado sobrevivir.

“La sociedad ha sido noble, ya que ahora contamos con un edificio propio ubicado en Camelias 1603, sin embargo, deseamos lograr una mayor apertura en escuelas regulares y abrir nuevas fuentes de trabajo para las personas invidentes.

“A través de esta difusión se logrará que quienes son jefes de familia y no tienen empleo descubran formas de autoemplearse aprendiendo a hacer trabajos y oficios”.

Estamos orgullosos de que tres deportistas del grupo se encuentran en el Salón de la Fama por destacar a nivel nacional en el deporte.

AMOR A CIEGAS

Se han formado infinidad de matrimonios respaldados por la madurez que adquieren al conocer herramientas para afrontar la vida.

“Donde quiera que encuentren un ciego o un débil visual, bríndenle apoyo no tengan miedo a acercarse”, comentó la directora del Cecapi, a la vez añadió que a pesar de recursos tan importantes como el bastón blanco, siempre es necesaria la guía y la descripción de quienes les rodean.

“La forma más hermosa de dar gracias a Dios porque veo, es brindar ayuda a quienes no ven”, añadió e informó que cuentan con un servicio de albergue el tiene a 25 personas y se mantiene con la voluntad de la gente, misma voluntad con la que durante diez años se albergó a 20 niños del medio rural.

HORARIOS

La escuela permanece abierta de las 3:00 de la tarde a las 8:00 de la noche de lunes a viernes y los fines de semana se dan actividades extraescolares.

El 2, 3 y 4 de abril tendrá lugar el Deportivo Estatal de Ciegos y Débiles Visuales que forma parte de estos festejos y al cual invitan a formar parte.

EL MEJOR LUGAR

Yo conozco un lugar, donde todos somos una gran familia

  • Un lugar, donde todos somos felices
  • Un lugar, donde todos somos cada día mejores personas
  • Un lugar, donde todos hemos aprendido a ver con la luz del alma.
  • Este lugar se llama Cecapi

-Óscar Zaldívar Escalante, 16 años, Invidente

Es un orgullo contar con el Cecapi

Que Dios bendiga a cada uno de sus bienhechores, directivos y voluntarios.

  • Gracias por la mano que nos da día a día, por levantarnos cada vez que tropezamos.
  • Gracias por ser ésta semilla de amor que ha dado tantos frutos desde hace 28 años.

-María Guadalupe Martínez Burciaga

Escrito en: personas, lugar,, todos, actividades

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