
San Jorge bendito, patrono de Durango
Armando Acevedo / El Siglo de Durango
Durango
Año con año, cada 23 de abril, miles de fieles devotos se dan cita en la Catedral de Durango para encomendarse ante la escultura de un joven montado sobre un caballo y debajo de un dragón, su nombre es San Jorge, el patrono que los protege de las picaduras de los animales ponzoños.
"San Jorge Bendito amarra tus animalitos con un cordoncito bendito para que no nos piquen ni a mí ni a mis hermanitos", es la frase que acompaña a la tradición de llevar ante el patrono un ramito de flores, velas, artículos o cualquier otra ofrenda para bendecir y conseguir la protección en esta temporada de calor.
LA HISTORIA
Se cuenta que San Jorge fue un caballero de la edad media que consiguió vencer un dragón, por lo tanto sería capaz de proteger a los demás de cualquier otro animal peligroso. Es así como los duranguenses depositan toda su fé en él para que terminara con la gran plaga de alacranes que azotaba a la ciudad.
Fue el obispo número 15, Pedro Anselmo Sánchez de Tagle, quien fiel a esta figura, en 1749 lo nombró como el Santo patrono de la ciudad y oficializó el 23 de abril de cada año como la fecha para celebrar con una ofrenda a San Jorge, el único capáz de cuidar a los niños contra el piquete de estos animales, pues en esa época no existía algún remedio efectivo contra la picadura de alacrán.