Madera de Guanaceví se 'fuga' a Chihuahua
La madera que se extrae del municipio de Guanaceví se va directamente al vecino estado de Chihuahua y ya no baja a Durango por el mal estado de los caminos rurales.
Luis Roberto Olivas, secretario del Ayuntamiento de Guanaceví, dijo que lamentablemente los 530 kilómetros de caminos de terracería y brechas que tienen en el municipio se encuentran en muy mal estado.
Esta situación ha provocado que los camiones de madera se tarden mucho tiempo en bajar y poder llevar su carga a los aserraderos en Durango o Santiago Papasquiaro.
Por ello, los transportistas prefieren bajar a un bordo por la comunidad de El Vergel, en el municipio de Ocampo, y de ahí llevar la madera a vender a Parral, en el estado de Chihuahua.
"Lamentamos que esto esté sucediendo y que por el mal estado de los caminos la madera no se quede en el estado como siempre había sido, pero los transportistas prefieren no arriesgarse, primero, por seguridad propia y, segundo, porque con esos caminos es más barato trasladar la madera a Parral que a Santiago o a Durango", comentó el Secretario del Ayuntamiento.
Dijo que han acudido a Guanaceví autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas del Estado (Secope), así como del Centro local de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) a realizar un análisis de los daños que presentan los 530 kilómetros de terracerías y brechas.
Incluso, el 21 de abril se firmó un convenio por parte no solo del Municipio de Guanaceví, sino de todos los municipios (27) que presentan caminos, carreteras y brechas dañadas, para poder solicitar recursos al Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden).
Independientemente de ello, comentó que se han estado haciendo gestiones en las dependencias federales y estatales para lograr bajar algo de recursos y destinarlos a la rehabilitación de estos caminos, pero hasta ahora ningún peso se ha logrado conseguir con este fin.
De los recursos del Ramo 33 precisó que ellos no pueden canalizar esos fondos para este tipo de obras porque los lineamientos son muy estrictos y van directamente a corregir los índices de marginación, es decir, a obras de introducción o ampliación de redes de agua, drenaje y energía eléctrica.
Solo les dejan un 15 por ciento del presupuesto listo para invertirlo en otras obras, pero ese millón y medio resulta insuficiente para todos los trabajos que se necesitan en la cabecera municipal, en otras comunidades rurales y en los caminos y brechas.
Por ello siguen a la espera de que las autoridades de la Secretaría de Gobernación emitan la declaratoria de desastre para que se liberen más recursos para rehabilitar caminos.
"Tengo entendido que están autorizados 200 millones de pesos desde hace buen rato, desconozco por qué no se han usado en este tema si es por lo que estamos padeciendo en 27 municipios, pero más los serranos", lamentó Luis Roberto Olivas.
En cuanto a las declaratorias de emergencia, indicó que hace 22 días le llegaron algunos apoyos como paquetes de láminas correspondientes a la declaratoria del mes de marzo, junto con algunos sarapes y otras cobijas destinadas a la gente que más se vio afectada por esas contingencias.