Oportuno inicio de la Policía Cibernética

A pesar que desde hace una semana se dejó escuchar el nombre de Unidad Cibernética Durango, apenas la noche del lunes entró formalmente en funciones, justo cuando se viralizó en Redes Sociales la denuncia por desaparición de una niña de 13 años de edad, que gracias a los trabajos de dicha corporación, en coordinación con la Fiscalía del Estado, se logró ubicar sana y salva en las calles de la ciudad.

La Policía Cibernética fue creada por la Secretaría de Seguridad Pública del Estado con la intención de frenar los delitos de trata de personas, pornografía infantil y fraude, así como otros ilícitos que provienen de la navegación por Internet, muchos de ellos, a través de las llamadas Redes Sociales.

MANOS A LA OBRA

En su primer día formal de la Unidad Cibernética, los especialistas procedieron a solicitar el acceso a los aparatos digitales de la menor Julia Carolina Piña Torres, de 13 años de edad, tras la denuncia interpuesta por sus familiares por su desaparición, tanto en la Fiscalía General del Estado como a través de las mismas Redes Sociales.

Con el trabajo de los especialistas el delitos cibernéticos, al accesar a la cuenta de Facebook de la menor, pudieron general diversas líneas de investigación que a final de cuentas apoyaron en su localización.

Pues de acuerdo con lo informado por el fiscal del Estado, Ramón Guzmán Benavente, la desaparición de Julia Carolina se generó la tarde de lunes, luego de que un joven la citó en un lugar, a través de Facebook, pero ella al sentir desconfianza optó por resguardarse con una señora que le brindó su apoyo ya que la noche la había sorprendido fuera de casa.

Fue al día siguiente cuando las investigaciones arrojaron el lugar donde la menor estaba y los policías procedieron a resguardarla entregarla a sus familiares sana y salva, sin que hubiera delito que perseguir.

LABOR DE LA CORPORACIÓN

Entre otras funciones, la Policía Cibernética se creó como estrategia para prevenir la comisión de delitos provenientes del uso de medios tecnológicos, y con el afán de generar una cultura de navegación segura.

También, en su primera etapa, realizará patrullajes en la red para detectar sitios, procesos y probables responsables de la comisión de ilícitos, a fin de proteger a las personas en general y, especialmente, a niñas, niños, adolescentes y grupos en condición de vulnerabilidad.

Se espera que en su segunda etapa cuente con más sistemas especializados, tecnología de punta en informática forense, analizador de redes, herramientas de identificación de códigos maliciosos y para el combate a la pornografía infantil, así como evitar el fraude electrónico, bulliyng, robo de identidad o de información personal, explotación infantil, extorsión, venta de sustancias prohibidas y armas, entre otros.