Suman 10 muertos por lluvias en Brasil
Al menos diez personas murieron y otras once fueron rescatadas con vida, algunas en estado grave, después de un alud de tierra en una comunidad del estado brasileño de Río de Janeiro, que se encontraba en estado de alerta por las fuertes lluvias que azotaron la región en los últimos días.
El comandante del Cuerpo de Bomberos y secretario de la Defensa Civil de Río de Janeiro, Roberto Robadey, explicó que la corporación recibió las primeras llamadas de socorro alrededor de las 4.20 de la madrugada (6.20 GMT) por parte de los moradores de la comunidad del Morro da Boa Esperança, en Niteroi.
Los equipos de rescate lograron sacar a 11 personas con vida de los escombros, entre ellas un bebé, dos niños y un hombre de 33 años, quienes fueron ingresadas en hospitales de la región con heridas de diversa consideración.
Un niño de tres años que fue rescatado en estado gravísimo pasó por una cirugía durante el día y se encontraba estable.
Algunos de los residentes de la comunidad resultaron heridos sin gravedad y recibieron cuidados médicos en el propio lugar y fueron liberados.
No obstante, diez personas tuvieron sus vidas segadas después de que parte de la cumbre del Morro da Boa Esperança se viniera abajo y enterrara a seis viviendas que estaban habitadas en el momento del siniestro.
Entre los fallecidos figuran un niño, dos ancianas, un hombre de 37 años, una mujer y un bebé de 10 meses.
El estado de Río de Janeiro, en especial la ciudad de Niteroi, se vio golpeado en los últimos días por fuertes lluvias y estaba en estado de alerta.
"Llovió mucho en los últimos dos días. Niteroi estaba en estado de atención y alerta de acuerdo con el área y las comunidades estaban avisadas de esa situación, con recomendación de buscar locales seguros", resaltó Robadey.
Según un balance parcial de los bomberos, al menos cuatro personas seguían desaparecidas después de más de 15 horas de rescate.
Ayuda
Más de dos centenares de personas ayudaban en los trabajos de rescate, en la zona de desastre.
Emergencia
Fueron instaladas tiendas de campaña a los alrededores de la región y una base de apoyo fue montada en una escuela.
Alerta
El alcalde, Rodrigo Neves, afirmó que el Morro da Esperança no era considerado un local de alto riesgo geológico.