El veneno de abeja y la piel
Por mucho tiempo hemos usado productos derivados de las abejas, como la miel, para tratar múltiples enfermedades. La apicultura es empleada desde el antiguo Egipto en la medicina para el tratamiento de hernias discales y dolores de espalda, como también la gripe o incluso muchos problemas de circulación.
Pero, ¿qué ocurre si te decimos que el veneno de las abejas es, de hecho, la solución a los problemas de tu piel y muchos otros? Sí, el veneno de abejas posee diferentes sustancias que se pueden emplear para combatir el envejecimiento y la inflamación o cicatrizar las marcas que deja el acné.
Existen muchos mitos alrededor de los productos que contienen veneno de abeja, los cuales dicen que puede funcionar como un Botox natural y devolver la tensión a la piel. Sin embargo, muchos estudios aseguran que no es del todo cierto.
Las cremas que contienen componentes irritantes para la piel (los ácidos), luego de que reduce la hinchazón, por naturaleza dejan un aspecto más brillante y terso gracias al efecto de la irritación. Es por esto que muchas veces se cree que funciona como Botox "natural", pero realmente es una falsa mejoría que dura cierto tiempo luego de ser aplicado el producto.
Lo que sí nos puede asegurar el veneno de abejas, es ser el tratamiento perfecto para tratar los brotes de acné en nuestra piel. Las sustancias que este contiene, como la melitina, la fosfolipasa o la apamina, sirven para la desinflamación de la piel cuando esta se ve afectada por el acné, al igual que cicatrizar las heridas que deja.
Marcas de belleza Coreana como Benton han perfeccionado sus productos y encontrado sacar provecho al veneno de abejas al juntarlo con otros componentes coadyuvantes al tratamiento del acné. Una combinación de baba de caracol, tea tree oil y veneno de abeja ha demostrado tener múltiples propiedades para embellecer la piel.
El aceite esencial de árbol de té, juega un papel muy importante dentro de la mezcla de muchas marcas en sus productos para reducir los efectos del acné. El aceite de árbol de té cuenta con propiedades antibióticas y desinflamatorias que reducirán el enrojecimiento e inflamación de la piel, además de hidratar la cara y darle una textura uniforme.