Disfruta sandía de diversas formas
La sandía es prima del melón y comparte muchas propiedades con él. Una de sus características es que es agua en un 95 por ciento, agua orgánica, capaz de saciar la sed al tiempo que mineraliza y refresca.
Es un regalo para los riñones y las vías urinarias. Ideal para curas depurativas y para eliminar toxinas de la sangre. Además contiene pequeñas cantidades de vitaminas A, C, folato, B1, B2 y B6, junto con hierro, potasio, magnesio y fósforo.
Sin duda es más saludable y nutritiva que cualquier bebida efervescente embotellada del mercado.
Rica en licopeno.-El licopeno es un carotenoide con propiedades anticancerígenas que se asocia al tomate. Sin embargo, la sandía lo posee en mayor concentración: hasta 5 mg por cada 100 gramos. Esta sustancia reduce el riesgo de sufrir varios tipos de cáncer.
Estamos acostumbrados a disfrutarla recién cortada, pero la sandía se presta a preparaciones deliciosas. Estas son mis preferidas:
En batido con especias: la sandía recién cortada es inmejorable e incomparable, pero si quieres disfrutar de nuevos sabores, pruébala triturada en batido con un poco de cardamomo molido, canela u hojas de menta.
Sopa fría: prepara un gazpacho sustituyendo el tomate por sandía en la receta tradicional. Por otro lado, para que lo tengas en cuenta, combina muy bien con pepino y lima.
Deshidratada: la cortas en finas o gruesas láminas, las maceras con tamari y las llevas a secar en el deshidratador o el horno a la temperatura más baja posible. Obtendrás una deliciosa golosina natural.
Aprovecha la cáscara: puedes vaciar la sandía y utilizarla como un bol para servir dentro zumo, batido o sorbete de sandía. O incluso puede ser el original recipiente de una buena ensalada de frutas.