Duranguenses, creativos en la industria de los videojuegos
Como parte del Clúster de Innovación y Tecnología que se lleva a cabo dentro del Centro de Exposiciones de la Fenadu, tuvo lugar el panel "Industria Creativa y Videojuegos".
Para esta interesante charla, se contó con la presencia de dos talentosos duranguenses, Javier Torres Aldama, Lic. en Lenguas con especialidad en Didáctica y Traducción y maestría en Ciencias de la Educación en la Universidad del Valle del Guadiana, quien en el año 2011 fundó Quetzalcoatl Games con su hermano Miguel Ángel Torres Aldama y en 2014, lanzaron en App Store y Play Store, el primer videojuego hecho en Durango, Fast Fast Paper Plane.
También participó Ángel Hernández, Ing. en Sistemas Computacionales, egresado del Instituto Tecnológico de Durango, con maestría en Diseño y Desarrollo de Videojuegos por la Universidad de Valencia, España y quien es fundador de Pixel Perfect Studio.
El panel fue moderado por Alberto Martínez González, director de Cat Box y de Fantastic Animation, quien abordó el mundo de los videojuegos desde diferentes perspectivas.
Durante la charla en la que estuvieron presentes diversos jóvenes interesados en el tema, los invitados destacaron cómo es que ha cambiado el panorama de la industria de juegos.
Ángel Hernández, quien tiene más de 17 años de experiencia en la industria de técnicas de la información en proyectos nacionales e internacionales, señaló que en cuanto a carreras, México está un poco limitado, no hay mucha oferta. Recordó cómo hace 20 años buscaba hacer una maestría en Desarrollo de Videojuegos y en México era inexistente. Sin embargo, ya hay más opciones en línea.
Dijo que en cuanto habilidades, esta es una industria, de las más rentadoras y “el 90 por ciento de los que desarrollamos juegos, somos autodidactas”.
Javier Torres Aldama, destacó que cuando inició no había mucho de esta industria, pero que por fortuna hoy en día hay escuelas.
Dentro de las múltiples opciones, destacó la sociedad que tiene con una clínica, donde ofrecen cursos de programación para niños de nivel primaria, “que obviamente es un inicio para los pequeños, pero con miras a que ellos vean en grande”.
Al preguntarles por el primer videojuego que tuvieron, Ángel Hernández dijo que fue “Asteroids” de Atary, mientras que para Javier fue Súper Mario Bros y también un juego que lo llevó a pensar en desarrollar por su complejidad: “Castlevania: Symphony of the Night”.
DIFERENCIADOR
“Si no parece divertido, probablemente no lo sea”, expresó Ángel Hernández, quien aseguró que su diferenciador ha sido poner énfasis en que los niños se diviertan y al mismo tiempo aprendan. “Muchas veces los juegos educativos son repetitivos, donde hay una historia que medio acompaña el tema, por eso trato de compensarlo con generar más engagement con los niños”.
Por su parte, Javier afirmó que su filosofía va más por lo retro, lo nostálgico. “A muchos nos pasa que añoramos lo que hacía cuando éramos niños y eso nos ha llevado a clientes de nuestra edad. Hemos buscado ese jugador casual que añora los juegos de Nintendo o Súper Nintendo. Para alguien que quiere iniciar, no necesita más que una computadora. “Lo demás vendrá poco a poco”, afirmó el fundador de Quetzalcoatl Games.
Dijo a los presentes que nada es fácil, “a mí me ha costado mucho trabajo lo que estoy haciendo pero eso es lo que me motiva, sacarlo adelante”. Además aprovechó para señalar que no está mal salir del estado para sobresalir, pero “queremos quedarnos aquí y beneficiar al estado y crecer”, comentó el desarrollador del primer videojuego hecho en Durango.
Actualmente, Javier está trabajando en un juego que se pretende lanzar para Nintendo, Xbox y Playstation y la meta a corto y mediano plazo es “lograr un buen demo para poder fondear la campaña. Y si se logra, podremos contratar talento duranguense”. En tanto que Ángel ya prepara un proyecto conformado por minijuegos educativos que estará disponible en un mes en plataforma.
