
Lo que debes saber de las Maldivas
A menudo se asocia Maldivas con viajes de novios o con un trasfondo romántico que (no vamos a engañarnos) tiene. Sin embargo, más allá de su faceta de destino idílico donde descansar, relajarse y dejarse mimar, Maldivas brinda otra vertiente más activa, empezando por su variada oferta en deportes acuáticos. Es más, dada su naturaleza, una buena recomendación es aprovechar el viaje para introducirse en la practica de alguna actividad como paddel surf, bodyboarding, kitesurf, windsurf o paseos en canoa. Y aquellos más avezados, aventurarse por las aguas cristalinas del océano Índico.
Aunque se trata de un destino soleado y de temperaturas cálidas durante todo el año, es aconsejable viajar entre noviembre y abril puesto que se alcanzan los menores índices de precipitaciones y sopla menos viento. A partir de mayo empieza el monzón que se extiende hasta octubre. Ahora bien, más allá del tiempo, a la hora de sopesar la mejor época del año para viajar a Maldivas conviene tener otros factores en mente, desde periodos óptimos en los que avistar especies marinas específicas a ofertas en vuelos y alojamientos.
Dada lo costoso que resulta todo en Maldivas por la falta de infraestructuras, conviene preparar el equipaje a conciencia. Así pues, no puede faltar protector solar e hidratante para después del sol; gafas de agua, tubo y aletas para hacer snorkel; sombrero, gafas de sol, traje de baño y una cámara acuática; medicamentos y útiles estéticos que se necesiten; y, ropa de algodón y lino capaz de proteger hombros y rodillas para usarlos por la calle en islas locales (dado que la sociedad maldiva es muy conservadora).
De las aproximadamente 1200 islas que componen el archipiélago de Maldivas, tan solo unas 200 están habitadas por lugareños y merece la pena visitarlas para conocer el estilo de vida local. El resto, simplemente están desiertas y algo más de un centenar son privadas y albergan impresionantes resorts (uno por cada isla) que cada vez copan más este paradisíaco destino al sur de la India que tan solo se eleva unos tres metros sobre el nivel del mar.
Los maldivos profesan la religión musulmana y sus hábitos sociales resultan muy austeros. En público no están bien vistos los gestos amorosos, así como el uso de bañador o bikini en ciertas playas. Tampoco se permite el consumo de alcohol, a excepción de en los centros turísticos.