Afectación. La falta de humedad en la zona Sierra ha derivado en un incremento en la presencia de plagas en cinco municipios.
En 2023, se han detectado al menos seis mil hectáreas afectadas por plagas en municipios de Durango, una cifra que es 50 por ciento superior a lo registrado el año pasado, informó la titular de la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente, Claudia Hernández Espino.
Explicó que apenas el viernes pasado se tuvo reunión del Comité de Sanidad, que está integrado por la Secretaría a su cargo, la Comisión Nacional Forestal (Conafor), la Secretaría de Recursos Naturales (Semarnat), la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SAGDR) y algunos técnicos representantes de silvicultores.
"Se ha detectado la presencia de plaga, principalmente del descortezador, del defoliador [y] llevamos una afectación de poquito más de seis mil hectáreas, si consideramos en comparación al año pasado pues prácticamente es el doble lo que se ha registrado el año pasado", detalló.
Los municipios con la mayor afectación son Pueblo Nuevo, San Dimas, Santiago Papasquiaro, Durango y Mezquital.
Si bien es cierto que la presencia de plagas en las zonas boscosas de la entidad es normal, como parte del ciclo biológico de los bosques, se realiza un monitoreo constante para evitar que la presencia de insectos se dispare.
Hernández Espino apuntó que, como parte de este monitoreo, personal de la Comisión Nacional Forestal realizará un sobrevuelo los días 21 y 22 de noviembre, para detectar, desde el aire, manchones de áreas afectadas.
En primera instancia, son los técnicos forestales quienes dan la voz de alerta respecto a la presencia de insectos fuera del rango; posteriormente la Comisión Nacional Forestal realiza estudios en la zona para determinar si la plaga excede el límite y autorizan acciones para contenerla.
Estas acciones pueden incluir cortas preventivas o algunos otros mecanismos para contener la propagación de los insectos.
Este 2023 se ha repartido unas 500 trampas con feromonas que fueron distribuidas en los municipios con la mayor proporción de zonas boscosas, lo que ha permitido controlar la proliferación; no obstante, "estamos muy conscientes que, derivado de la prolongada sequía, de las altas temperaturas el bosque está estresado", explicó.
La funcionaria estatal añadió que el cambio de temperatura y la presencia de heladas en la zona Sierra son factores que benefician el control de plagas en zonas boscosas, por lo que se espera que esto ayude a contener el problema.