Emilio Lozoya y su mamá van nuevamente ante el juez por el caso Odebrecht
Una vez más, el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, y su mamá, Gilda Margarita Austin y Solís, tratarán de evitar irse a juicio en el caso Odebrecht, y llegar a un acuerdo reparatorio con la empresa productiva del Estado.
Madre e hijo están citados al mediodía de este viernes en el Centro de Justicia Penal Federal, con sede en el Reclusorio Norte, a una nueva audiencia que se prorrogó por 30 días a solicitud de los imputados, para que su defensa revisara datos de prueba presentados por la Fiscalía General de la República (FGR) y mejorar la colaboración.
Con la oposición de la FGR, el juez de Control del Reclusorio Norte, Gerardo Genaro Alarcón López, aplazó para este 10 de marzo la diligencia intermedia en la que se prevé que el Ministerio Público Federal hará la acusación formal contra Lozoya Austin y su mamá por los delitos de lavado de dinero y asociación delictuosa por los sobornos de la constructora brasileña.
En enero pasado, la FGR pidió al juez no perder más el tiempo en aplazamientos y advirtió que sus fiscales están listos para lograr las penas de prisión solicitadas contra el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya y Gilda Margarita Austin, de 46 y 22 años, respectivamente, en el caso Odebrecht.
"Estamos listos y preparados para llegar en este caso hasta las últimas consecuencias, es decir a juicio oral y lograr las penas de más de 46 años que solicitamos para el señor Emilio, y de más de 20 años para la señora Gilda", sentenció uno de los fiscales en enero.
Sin embargo, Miguel Ontiveros Alonso, abogado de la familia Lozoya Austin, consideró que lo que procede en el caso de los sobornos de Odebrecht es un acuerdo entre el Estado mexicano y el exdirector de Pemex.
Cabe recordar que Lozoya Austin ofrece a Pemex 7.3 millones de dólares de reparación del daño en el caso Odebrecht, del que está acusado de recibir sobornos de la constructora brasileña por más de 10 millones de dólares.
Durante la audiencia del 17 de enero, Gilda Margarita Lozoya pidió que se tome una decisión sobre el caso y apeló al "sentido humano y de justicia" del presidente Andrés Manuel López Obrador.