
Té de bugambilia: lo bueno y lo malo
Tanto las hojas como la flor tienen propiedades antitusígenas, antipiréticas y expectorantes, es decir, ayuda a curar la tos seca, reduce la fiebre y quita la mucosidad de las vías respiratorias. Desde antiguas épocas ha sido utilizada para mejorar la salud humana.
Las raíces pueden servir como laxantes, así como también son antisépticas, pues ayudan combatir el acné, las infecciones y la descamación. Un estudio de científicos de la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) descubrieron que la bugambilia contiene berberina y gnaphalinas.
Al igual que el gordolobo y el chicalote, la bugambilia puede auxiliar en el tratamiento de enfermedades respiratorias, ya que la berberina y las gnaphalinas relajan el músculo que cubre la tráquea, de acuerdo con la explicación del académico de la FQ, Andrés Navarrete Castro.
EXPERIMENTOS
En un experimento con un animal cobayo, el cual presenta una tráquea similar a la de un humano, se llegó a la conclusión de que el consumo de bugambilia puede ayudar con diversos padecimientos, como el asma.
Tras un arduo procedimiento parecido a la medicina tradicional, en el laboratorio se analizaron las sustancias para comprobar sus beneficios para la salud. El químico, Navarrete Castro mencionó que las plantas medicinales se deben suministrar por medio de tés, infusiones alcohólicas o mezcladas con leche.
INVESTIGACIONES
Por otro lado, el Instituto de Investigaciones en Materiales (IIM) de la UNAM, analizaron y desarrollaron nuevos pigmentos a partir de esta planta, los cuales podrían ser sumamente útiles para la farmacéutica, la cosmética, los alimentos y la industria textil como sustituto de componentes dañinos para el ambiente y la salud.
Pedro Bosch Giral y Enrique Lima Muñoz, titulares de la investigación fueron quienes propusieron esta solución ante el panorama que se vive en cuanto a los problemas ecológicos, además, los pigmentos son de menor costo que los convencionales porque sus materiales son baratos, abundantes y estables.
DATO
No se recomienda para niños, embarazadas o en lactancia, ni a pacientes con enfermedades renales.
CUIDADO
El consumo en exceso podría provocar efectos secundarios como: alergias, vómitos y diarrea .