¿Usas correctamente el desadorante?
Algunos utilizan desodorantes en spray, otros en roll-on y muchos incluso aplican cremas. Pero no todos son iguales y cada uno funciona distinto en las personas.
De igual forma, no sólo importa el tipo, sino también su formulación. Por ejemplo, ¿te has preguntado alguna vez cuál es la diferencia entre desodorante y antitranspirante? ¿O cómo cambiar de un desodorante de aluminio a uno natural? Sea cual sea el que utilices: hay razones por las que puede dejar de funcionar de repente. A continuación, te contamos cuáles son.
-Utilizas el desodorante equivocado.-Es importante que entiendas la diferencia entre un desodorante y un antitranspirante para que puedas encontrar la fórmula adecuada para ti. En pocas palabras: un desodorante está diseñado para acabar con los malos olores, mientras que un antitranspirante retiene la humedad y hace que sudes menos. Si sudas mucho y tiendes a oler mal, debes utilizar un antitranspirante con sales de aluminio.
-Sólo usas desodorante por la mañana.-Algunos expertos recomiendan aplicar el desodorante por la noche, antes de acostarse, porque funciona mejor cuando la piel está seca. De esta forma, puede actuar durante la noche (mientras duermes y sueles sudar menos que durante el día) y desarrollar todo su efecto. Por eso algunos desodorantes y antitranspirantes afirman durar hasta 72 horas.
-Eres demasiado impaciente.-¿Has cambiado recientemente de un antitranspirante convencional a un desodorante natural sin aluminio (como este de limón)? Entonces tu cuerpo necesita un tiempo para acostumbrarse al nuevo. La piel puede tardar hasta cuatro semanas en adaptarse y los nuevos ingredientes en hacer efecto. Así que si crees que tu nuevo desodorante natural no funciona, prueba usarlo para ver si tu cuerpo sólo necesita tiempo para adaptarse.
Llevas la ropa equivocada.-De hecho, nuestra ropa puede ser la culpable de que olamos mal. A menudo se culpa directamente al desodorante, pero si llevas ropa de fibras sintéticas, por ejemplo, el olor del sudor puede quedar atrapado porque la piel no puede respirar bien por debajo. En cambio, las fibras naturales como el algodón, el lino o el bambú son más permeables al aire y liberan los olores en lugar de atraparlos. Así que antes de cambiar de desodorante, comprueba primero los tejidos de tu ropa.
Después de la ducha, ¿te pones el desodorante, te vistes y ya está? Lo bueno de este producto es que actúa de inmediato, pero debes asegurarte de que tus axilas estén secas cuando te lo pongas. Así que frótalo bien después de ducharte, de lo contrario la humedad impedirá que los ingredientes se absorban correctamente en la piel y actúen.