Abundan los tramos pestilentes en salida de la ciudad de Durango
La distancia y la poca vigilancia que hay en la vialidad Ferrocarril, ha ocasionado que existan tramos completos convertidos en tiraderos a cielo abierto, en los que lo mismo se puede encontrar alimentos podridos, ropa vieja, llantas usadas, escombro, animales muertos y hasta muebles.
El Siglo de Durango realizó un recorrido en esta importante vialidad de la capital duranguense, que conecta a la zona norte de la mancha urbana con la supercarretera a Mazatlán, en su tramo desde el parque Sahuatoba hasta el distribuidor vial del rancho Las Yucas; por lo que, además, es una imagen de la ciudad para las personas que acceden por esta ruta, que está sumamente contaminada con auténticos focos de infección.
Precisamente por su ubicación y conexión, se trata de una vialidad que es ampliamente recurrida por deportistas, ya sea corredores o ciclistas, que aprovechan la baja circulación y lo que anteriormente era la calidad del aire, para ejercitarse, pero con el riesgo de inhalar elementos nocivos que hay en el ambiente por esta contaminación.