Triunfo. Las Águilas del América mostraron un futbol práctico en un partido en el que por momentos fueron dominadas para derrotar este sábado por 1-0 a las Chivas.
Con poco, pero muy poco, las Águilas del América se llevaron el Clásico Nacional en el Estadio Ciudad de los Deportes.
Deslucida victoria azulcrema (1-0) que sirve de mucho al ánimo de unos los emplumados que llegaban como víctimas y al final fueron victimarios. El bicampeón del futbol mexicano sigue sin mostrar su mejor versión, sufre en demasía, pero el Clásico de México tenía que ganarlo como fuera. El Guadalajara, que llegaba como favorito, volvió a caer ante su acérrimo rival. La revancha rojiblanca tendrá que esperar porque los de Coapa volvieron a pegar. Golpe al orgullo tapatío que tuvo todo a favor para quitarse el dominio de las Águilas y al final quedaron sin nada.
DESPERDICIARON LA OPORTUNIDAD
El primer aviso importante en el cotejo fue del Rebaño. Alan Mozo se sumó al ataque y sacó un disparó fuerte a la cabaña de las Águilas, pero Luis Ángel Malagón apareció con una soberbia atajada. El grito de gol se ahogó en la fanaticada de las Chivas.
EL GOL
Los de André Jardine no podían salir de su zona. Eran menos que el rival, pero en una jugada a balón parado encontraron recompensa sin merecer. Ramón Juárez, el joven central de las Águilas, aprovechó un rebote dentro del área tras un cabezazo de Henry Martín para abrir el marcador.
El estadio de la colonia Nochebuena, en su mayoría americanista, estalló con el gol que los ponía arriba y al final sería suficiente para llevarse la victoria.
El partido se equilibró, pero los amarillos no volvieron a llegar con peligro hasta el tiempo agregado con un fuerte disparo al poste del uruguayo Brian Rodríguez.
SEGUNDA MITAD
Chivas fue mejor, buscó en todo momento, pero no pudo contra el muro de cinco hombres que puso el técnico Andre Jardine para cuidar su pobre ventaja. En el ambiente se respiraba tensión, hasta que el silbante decretó el final.
Las Águilas ganaron el Clásico Nacional, una verdadera bocanada de aire, y las Chivas siguen regalando vergüenzas a su afición. Cuando parecía que tenían una oportunidad inmejorable para vencer a su rival más odiado, que sumaba apenas dos triunfos en el Apertura 2024, volvieron a fallar en el intento. Gloria azulcrema y otro duro golpe rojiblanco.