Durango, preocupado por el 'Culiacanazo extendido'
“Son días largos en Sinaloa”, aseguran los compañeros de la prensa del estado vecino a quienes se consulta diariamente para corroborar información que no deja de surgir en redes sociales.
La cancelación de la ceremonia del Grito de Independencia en varios municipios de Sinaloa es la confirmación de que la violencia en ese estado se ha desbordado, a pesar de la negativa del gobernador Rubén Rocha Moya, fiel al estilo del líder de la 4T que minimiza siempre la inseguridad .
La Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Mazatlán confirmó que debido a la violencia que se registra en Culiacán y el centro de Sinaloa se han cancelado hasta un 50 por ciento de las reservaciones hoteleras para este puente patrio. Gran parte de esas reservaciones, eran de duranguenses que prefieren no arriesgarse.
Ayer por la noche circuló un video en el que se confirmaba un bloqueo en la supercarretera Durango a Mazatlán, a la altura del túnel El Sinaloense; Caminos y Puentes Federales (Capufe), avisaba a la población del corte a la circulación, sin especificar el motivo.
En Durango las autoridades de seguridad insisten en que los hechos delictivos se están presentando en el estado vecino, pero no debemos olvidar que ambas entidades siempre se han considerado un mismo territorio, para lo bueno y también para lo malo.
A lo largo de los poco más de 200 kilómetros que separan a la capital de Durango del puerto de Mazatlán, existen comunidades que en los últimos días han reportado enfrentamientos entre grupos armados que hasta hace poco eran socios, pero que tras la captura-secuestro de Ismael “El Mayo” Zambada, se convirtieron en enemigos.
Si bien la violencia en Zacatecas, también estado vecino, nos parecía lejana y sin grandes afectaciones para los duranguenses, lo que está ocurriendo en Sinaloa sí ha desatado una gran preocupación en el sector político, empresarial y social de Durango.
En las mesas de seguridad nacional y estatal se ha tocado el tema en varias ocasiones y se ha apoyado a las autoridades federales con el reforzamiento de seguridad en algunos municipios colindantes con el famoso “Triángulo Dorado”, pero es imposible quitar el ojo de la ruta más rápida hacia el Pacífico, la única que permite el tránsito rápido y seguro a los transportistas de bienes y servicios hacia el norte del país.
El problema para Durango es que el Gobierno de Sinaloa no parece mostrar interés en resolver la ola de violencia, pues solo minimiza la situación, además que el Gobierno Federal parece rebasado por la enemistad que ha dividido al cártel más poderoso de Latinoamérica.
Ojalá este “Culiacanazo extendido”, como lo han llamado los periodistas de Sinaloa, termine pronto y sin afectaciones para ambos estados porque el ‘boom’ económico que ha tenido Mazatlán en los últimos años se debe en gran parte a los duranguenses y norteños (Coahuila y Nuevo León) que sienten a la Perla del Pacífico también como su tierra.