El quiebre político en Coahuila
Lo sucedido entre la dirigencia nacional de Acción Nacional y el gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez, muestra el desgaste y la vulnerabilidad de la política mexicana; y el rompimiento de un romance sobrenatura.
Y es que el PAN quedó fuera de la alianza del PRI y PRD por las alcaldías de Coahuila para este 2024, luego del desacuerdo que tuviera el líder nacional del PAN, Marko Cortés, con el mandatario de ese estado.
Una llana hoja blanca, doblada a la mitad, con las firmas de los dirigentes nacionales del PRI, PAN y el propio Manolo, evidenció la búsqueda del poder por el poder, dejando a un lado las necesidades tan apremiantes de los ciudadanos.
La reacción de un ser humano siempre mostrará de qué está hecho al momento de enfrentar algo que no salió como lo esperaba; es decir, muestra su fortaleza o debilidad de carácter en cómo enfrentar la frustración.
Tal es el caso del "líder" nacional del panismo, arrebatado en sus formas; inmaduro para transitar en la política; falto de estatura emocional para encarar una crisis. Lo que nos lleva a deducir que puede dar más sorpresas y estas pueden darse al asignar candidatos.
El Gobernador coahuilense aseguró que lo hecho por Marko Cortés fue considerado como una traición al panismo de Coahuila y que le generará problemas con quienes eran sus representantes en la entidad.
"Lo que hizo el dirigente del PAN merma completamente el proyecto nacional, impacta, le afecta, lo hiere; fue realmente darle un golpe muy fuerte al panismo de Coahuila", palabras textuales de Manolo.
El quiebre político de esta entidad es sólo la crónica de un desenlace anunciado que tendrá su efecto nacional el próximo 3 de junio del 2024.
@arlncontreras