Efectos. La ausencia de lluvias importantes desde el pasado mes de septiembre ha acentuado nuevamente las condiciones de sequía, aunque en la primera quincena de noviembre no se agudizó.
Hasta la primera quincena del mes de noviembre, más del 82 por ciento del territorio duranguense presentó algún grado de sequía.
De acuerdo con la última actualización del Monitor de Sequía, de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), durante los primeros 15 días de noviembre las condiciones de sequía no se agravaron, pero tampoco mejoraron.
El reporte oficial del Monitor de Sequía indicó que la presencia de la circulación anticiclónica en niveles medios de la atmósfera mantuvo escasas lluvias y ambiente caluroso a muy caluroso en las entidades del norte de México.
De forma tal, que Durango siguió presentando los mismos 13 municipios con sequía excepcional, el grado más alto de las mediciones del Monitor; se trata de Canatlán, Durango, Guanaceví, Hidalgo, Indé, Ocampo, El Oro, Otáez, Pueblo Nuevo, San Bernardo, San Dimas, Santiago Papasquiaro y Tamazula. Esto representó el 10.5 por ciento de la superficie estatal con dicha afectación.
Así como los mismos dos municipios con sequía extrema, que fueron Tepehuanes o Nuevo Ideal, y que significaron otro 10.2 por ciento del territorio duranguense.
Situación que se repitió también para la sequía severa, en la que fueron catalogados los mismos 10 municipios de la quincena previa, que en este caso fueron Canelas, Cuencamé, Mapimí, Mezquital, Nazas, Peñón Blanco, Rodeo, San Luis del Cordero, San Pedro del Gallo y Topia. En este caso, la afectación abarcó el 26.2 por ciento del terrotorio estatal.
Mientras que otras siete demarcaciones fueron catalogadas en sequía moderada, que fueron Coneto de Comonfort, General Simón Bolívar, San Juan de Guadalupe, San Juan del Río, Santa Clara y Súchil; significando el 30.3 por ciento de la extensión duranguense.
Es decir, solamente siete municipios fueron considerados fuera de toda condición de sequía; pero cinco de ellos se etiquetaron con condiciones anormalmente secas, tratándose de Gómez Palacio, Guadalupe Victoria, Nombre de Dios, Pánuco de Coronado y Tlahualilo, significando el 14.7 por ciento de la entidad; y solo Lerdo y Vicente Guerrero fueron catalogados en situación normal, abarcando apenas el 8.1 por ciento.