Error colosal

Fue un grave error estratégico en la campaña de Kamala Harris haber centrado la atención en Trump en lugar de poner en primer plano sus propuestas y planteamientos.

El reflejo más importante es que no perdió por ser mujer, así como la Presidenta de México no ganó por lo mismo; y es que la sustitución de la vicepresidenta estadounidense después del desastroso primer debate del Presidente Joe Biden no fue de agrado para una gran parte de los demócratas, puesto que ya habían pasado las elecciones primarias dentro del partido demócrata.

En el discurso pronunciado por la ex candidata demócrata en la que expresó "No se desesperen", "Sé que mucha gente siente que estamos entrando en una época oscura, pero por el beneficio de todos nosotros, espero que ese no sea el caso".

Palabras sabias que gustosos podemos adoptar en la vida política y social de México, comprobada por la historia de pobreza, violencia, traiciones, corrupción a niveles inimaginables y ahora llenos de amor de escasez, de miedo, de la distribución de culpas para no tomar la responsabilidad que ahora tienen, del aumento en la corrupción, la cual ahora es más cara, y no se nos olvide el estado de conformidad que se les dotó a los jóvenes dándoles dinero disfrazados de becas para conseguir su favor electoral, de las personas de la tercera edad, quienes al ser un sector abandonado por su familia ve en la mano del partido Morenista un aliado y cuidador.

Nosotros no nos imaginamos entrar a una época obscura como dijo la Vicepresidenta estadounidense, México ha vivido en la obscuridad desde la invasión de la realeza española.

Al mismo tiempo, el Senado estadounidense ahora está en manos de los republicanos, lo que le da la oportunidad al presidente electo Donald Trump de avanzar en su agenda política, al menos durante los próximos cuatro años, y es probable que mantengan el control en la Cámara de Representantes.

Podemos decir que no difiere en mucho la circunstancia del Poder Legislativo mexicano, con el contraste de la aplaudida traición del Senador Yunes o del atropello perverso en contra de los trabajadores del Poder Judicial de la Federación; que si bien, se requiere una reforma judicial con la intención de mejorar el actuar de las policías de los estados y de los municipios en México, así como la labor de los ministerios públicos y del personal de las fiscalías, se toma venganza por el control constitucional que realizó la administración pasada del flamante Andrés López; pero bueno, lamentablemente los mexicanos estamos tan acostumbrados al dicho "vamos de mal en peor" y ese apocalipsis seguirá mientras esté en manos de quienes ahora están en el poder y ejercen de una manera desmedida y controladora.

Pareciera que México estuviera en riesgo por lo que, en décadas pasadas el crimen organizado orquestó para el ingreso de drogas al suelo estadounidense, así como la pobreza que América Latina ha sufrido en las últimas décadas.

La preocupación del presidente electo Trump está totalmente justificada, y es que lo que el populismo en América Latina ha dejado es pobreza y desesperación, por eso es que su población busque llegar a suelo estadounidense al ver mermadas las oportunidades en sus países de origen.

Son problemas reales de los que el presidente electo Donald Trump se hará cargo con todo el poder que tenga. Y la verdad es que es aplaudible que se enfoque en solucionar la realidad por la que atraviesa su país, y no ilusiones sustentadas en mentiras y palabras vacías.