La capital ya no es tan segura
Hurtos en el Centro Histórico, colonias circunvecinas y fraccionamientos de la periferia; robos a establecimientos comerciales, casa habitación y sustracción de objetos y partes de automóviles, tanto de día como de noche, en Durango capital se han vuelto de manera preocupante una constante durante la actual administración municipal.
El entorno ante el cual nos enfrentamos quienes vivimos en la otrora callada y tranquila ciudad colonial es de mayor inseguridad pese a que se intenten desvirtuar las propias denuncias ciudadanas, sobre los delitos de todo tipo cometidos en medio del temor de las víctimas, y su incertidumbre sobre el actuar mediante las corporaciones del orden.
De acuerdo con diversos testimonios de habitantes en los asentamientos más complicados del Valle del Guadiana, se han estado presentando inclusive robos con violencia a transeúntes, a tiendas de conveniencia y en las mismas viviendas, hasta donde los presuntos delincuentes ingresan sin importar que los propietarios se encuentren al interior de los inmuebles.
Casi innumerables han sido ya las ocasiones en que los dirigentes de organismos comerciales han hecho el llamado a las autoridades, propiamente al Alcalde capitalino, para detener la creciente ola de robos que ha estado afectando tanto a comerciantes agremiados a las cámaras, como a los dueños de establecimientos que prefieren trabajar independientes.
Sin embargo y muy a pesar del emplazamiento que ha hecho dicho sector a las autoridades, ni el reforzamiento de la estrategia de prevención contra estos delitos, ni la presencia policiaca han podido ser suficientes. Los comerciantes en conjunto, grandes y pequeños, han reportado importantes pérdidas.
Toda vez que los elementos policiacos realizan rondines diarios por las zonas más conflictivas, los amantes de lo ajeno evaden la vigilancia y perpetran sus atracos. Comerciantes y vecinos están tomando sus propias medidas para inhibir los robos, como la instalación de circuitos de video; sin embargo, no todos pueden costear este tipo de tecnología pese a que existan en el mercado equipos de precios accesibles.
La ciudad de Durango, si bien no se encuentra entre las ciudades más inseguras del país, tampoco está entre las primeras diez consideradas como seguras para sus habitantes, esto según la última Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), llevada a cabo por el INEGI a finales del año pasado y publicada apenas iniciado el 2024.
Seguramente para el levantamiento que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía realice durante el presente año, los números no habrán de ser mejores para la capital duranguense, dado el incremento de denuncias de los delitos del fuero común, que son los que más afectan directamente a los ciudadanos en lo individual y en lo familiar; en su vida e integridad corporal y su patrimonio.
EN LA BALANZA.- Sigue la tunda contra Verónica Pérez Herrera, junto con otros políticos que han sido criticados por registrarse como integrantes de la comunidad LGBT, primero para ser candidatos y ahora por haber obtenido cargos públicos mediante la acción afirmativa de la diversidad sexual. La panista duranguense recientemente obtuvo su constancia como diputada federal plurinominal bajo este esquema, pese a que en 2022, siendo diputada local, en el Congreso del Estado votó en contra de iniciativas a favor de estos grupos.
CERROS SECOS Y PELONES... Grandes expectativas generó entre los habitantes de la Comarca Lagunera el paso de la tormenta "Alberto", con respecto a la recuperación en la presa Lázaro Cárdenas, conocida como "El Palmito", principal almacén del vital líquido para aquella región. Tras encontrarse en el denominado "volumen muerto" al registrar menos de 700 metros cúbicos de agua, con las pocas lluvias generadas apenas alcanzó un 24 por ciento de su nivel ordinario.
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