La duranguense Grecia Monroc estrena el sencillo ‘Happy Meal’

La cantante duranguense Grecia Monroc, continúa su camino en la música, ahora con el estreno de su sencillo “Happy Meal”, un tema que llega cargado de optimismo tras una ruptura amorosa.

Disponible ya en las distintas plataformas de música digital, “Happy Meal” mezcla distintos ritmos musicales que lo vuelve prácticamente etéreo, pero que salta hasta el rap melancólico, por lo que una vez más la duranguense deja ver de qué está hecha, siempre desde una visión innovadora en la industria.

En entrevista, Grecia Monroc habló de este sencillo, su séptimo lanzamiento del año, que además es un primer vistazo a su próximo álbum musical.

“‘Happy Meal’ se trata de ese momento después de un rompimiento, cuando ya pasaste por todo el dolor, por intentar entender qué hiciste mal, donde estuvo el punto de quiebre y el deseo de viajar al pasado para revertirlo y solucionarlo”, explicó.

“Y habiendo pasado por todos esos sentimientos de impotencia, sueltas todo y te das cuenta de que no necesariamente tenía que haber algo mal contigo, que a veces simplemente la persona buscaba otra cosa totalmente distinta de lo que tú eres”, añadió.

Y justamente con esa historia y ese sentimiento es lo que vuelve a este tema, uno ideal para soltar, para entender lo que no fue, desde una vista positiva y sincera. “Y eso no está mal. Al terminar la relación esa persona puede obtener lo que desea y tú puedes entender que tú eres valiosa y un verdadero regalo divino para la persona correcta”.

CONECTAR CON SU PÚBLICO

Bajo ese contexto y a manera de invitación, es como Grecia Monroc permite identificarse, pues ¿quién no ha pasado por una situación así? Algo que, de cierta forma, es la intención de la artista para con sus escuchas.

“La intención es expresar un sentimiento por el que creo muchas personas hemos pasado. La intención siempre es conectar y compartir. Ningún sentimiento es erróneo, es parte de la experiencia humana porque todos podemos estar ‘ardidos’ y después darnos cuenta de que no es tan trágico”, reconoció. “La vida debería ser un viaje entretenido de autodescubrimiento”.

Por esta razón, “Happy Meal”, que en español se podría traducir como “Comida feliz”, que hace referencia también a ese momento de tranquilidad que llega después del caos y se canaliza con el alimento, es una antesala perfecta de su próximo material discográfico, pues en él se reúnen tantos aspectos de lo que es ella como compositora pero también su habilidad para hacer ese rap tan nostálgico, algo nada sencillo.

TRAS EL DISCO

Con este lanzamiento, Grecia Monroc se prepara para nuevos proyectos, sobre todo ese álbum que solo esperar ver la luz, del que habló al respecto y al que se refirió como un sueño realizado.

“Acabo de grabar mi primer disco, con V1c3 uno de mis productores favoritos y en Mazatlán, uno de mis lugares favoritos de la Tierra. Estoy sumamente agradecida, con la vida y conmigo, por haber luchado contra mis inseguridades para cumplir este sueño”, confesó.

Y es que a lo largo de los años, su camino por la música, y también el que tiene como escritora en el mundo de la literatura, ha sido un proyecto que ha visto cómo se formaron de menos a más, en el que se redescubrió así misma, permitiéndose ser única, auténtica, quizá un poco difícil de definir.

“Es una autoexploración constante (su proyecto), conectar mis sentimientos con el pulso de la vida a través de los pulsos de un beat. No sé si en términos de género tiene una definición. Mi productor dice que es trip hop, mi hermana dice que es ethereal rap y mi maestra de canto dice que es pop urbano místico (...) ya no hay géneros, todo es jugar y aprender”, señaló.

UN CIERRE MÁS EXPERIMENTAL

Por esa razón, visto y explicado con otras palabras, Monroc define su proyecto como una necesidad personal de encontrar nuevas formas de expresarse artísticamente y conectar con el otro.

“Es como una forma muy elaborada de hacer amigos en modo antisocial, es como ‘Hola me pasaaa estoooo, ¿a alguien más le ha pasado? ¿En la Tierra o en Saturno?’, es prácticamente eso”, dijo.

Así, con este lanzamiento por detrás, con los pies bien puestos en su música, Monroc se alista para terminar el año con muchos planes, pero también con esa visión de no tener un género, por lo que esperar probar nuevas cosas y pisar más escenarios.

“Este año lo termino venciendo mis miedos y con ganas de tocar en vivo, de grabar canciones y hacer experimentos, también quiero ver cómo se escucha mi música con cuerdas y tubas y trombones (...) un corridón poético bien tumbado o cualquier cosa, no sé”, concluyó.