Único. Los duranguenses han creado varias presentaciones del insecto insignia de Durango, siendo las paletas y brochetas de alacrán con chile las más famosas.
Con el inicio de su construcción en 1879 y su inauguración en 1881, este mercado se ha consolidado como uno de los favoritos para visitar no solo para los locales y personas que residen cerca a la zona sino también para todos los extranjeros que vienen de estados vecinos o de otros países.
Este recinto tiene un atractivo a diferencia de muchos mercados en la capital duranguense, y es el arraigo que le tienen al alacrán, dado que han sabido adaptar a la insignia de Durango en muchos productos para mercadear, dentro de los que más destacan son las botellas de alcohol con un alacrán dentro, paletas de alacrán, llaveros de alacrán, etc.
El Mercado Gómez Palacio, en su mayoría, está conformado por vendedores que han adquirido el negocio por herencia familiar. Desde temprana edad, las familias que conforman este mercado incitan a los más chicos a unirse al negocio familiar
Adicional a todo esto, la gastronomía y las prendas de vestir junto con recuerdos son parte de los productos estrella de este mismo, destacando sus guisos y menudo, así como también los ponchos y guaraches hechos a mano junto a los llaveros de Durango.