Problema. Las llantas usadas invaden todo tipo de espacios en la capital: se pueden ver en parques, calles, lugares públicos, terrenos baldíos y al lado de las carreteras.
En Durango se sigue buscando una alternativa para poder abatir el problema de llantas usadas que ha desechado la población, que ya suman más de un millón y que provocan contaminación, pues, además de que se dejan en espacios públicos, la realidad es que no se pueden reciclar.
Cuando se retiran por parte de las autoridades, estos neumáticos de las calles, lotes, canales y hasta parques, no se puede hacer mucho con ellas, más que acumularlas.
Solo del fin de semana en la limpieza del Arroyo Seco, se retiraron mil 100 llantas, mientras que sumaron 3 mil por los operativos que se han hecho en los últimos días en diferentes zonas.
Mientras tanto, el Gobierno Municipal ha informado que siguen buscando una opción que pueda ser la más acorde con el medio ambiente, para deshacerse de estos desechos.
Cuatro empresas han sido las consultadas buscando una solución, entre las que se ha ofrecido la trituración o la pirólisis de llantas, entre otras, pero hasta el momento ninguna ha ofrecido una opción viable, según lo comentó el presidente municipal, José Antonio Ochoa Rodríguez.
No queremos hacer una inversión o una concesión en algo que no venga a solucionar este problema, que es delicado, real y que tiene que atenderse, remarcó.
El Alcalde reconoció que no es fácil, porque se requiere de tecnología compleja, una mejor opción que sea real y sostenible en el tiempo para acabar con el problema.
Mientras se encuentra un método sostenible de reciclaje, la ciudadanía debe ser consciente de no tirar sus llantas usadas en cualquier sitio, porque contaminan el ambiente y el suelo, por el tipo de material, que, además, dura años para poderse degradar, concluyó exponiendo el Presidente Municipal.