Octavio 'Centavo' Muciño: 50 años de un asesinato no resuelto
Octavio Muciño Valdés es considerado como uno de los mejores delanteros en la historia del balompié mexicano, puesto que forjó una brillante trayectoria en tan solo 5 años como futbolista profesional. Hasta la fecha, los aficionados de antaño recuerdan las hazañas del "Centavo" Muciño con la Máquina Celeste del Cruz Azul, club en el que dejó una huella imborrable como leyenda.
Octavio se formó como futbolista en Ciudad Cooperativa Cruz Azul, instalaciones ubicadas en Jasso, Hidalgo. Desde muy temprana edad, Muciño demostró un gran talento con los pies, destacando como una de las joyas más importantes de las Fuerzas Básicas en la década de los 60s. Su buen desempeño le valió para ser promovido al primer equipo en 1969.
En 1969, debutó como jugador de Primera División con los colores de la Máquina. Tan solo un año después, en el Torneo México 70, Octavio Muciño se consagró como campeón de goleo a los 20 años de edad, además que Cruz Azul conquistó su segundo título de liga, hazaña que convirtió al "Centavo" en un ídolo de la institución.
Ya consolidado como titular en la escuadra cementera, Muciño fue pieza clave en la obtención de los campeonatos 1971-72 y 1972-73, certamenes en los que compitió por la presea de artilleros ante un gran delantero de la época como Enrique Borja. Octavio dejó huella como goleador de Cruz Azul, recordado como un certero cabeceador que ganó 5 trofeos con el conjunto cruzazulino (3 títulos de Liga MX y 2 Concachampions).
En 1974 fue fichado por las Chivas, club para el que jugó por una temporada, tiempo suficiente en que se convirtió en referente del Rebaño Sagrado. Sin embargo, su temporada se vio interrumpida por una tragedia.
3 de junio de 1974: El día que se apagó una estrella
El 31 de mayo de 1974 es remembrado como uno de los días más oscuros del futbol mexicano, fecha en que se suscitó una tragedia.
Muciño y su mujer se fueron a cenar con 2 amigos del futbolista y sus esposas al restaurante Carlos O`Willys de Guadalajara. No obstante, un individuo que estaba sentado en la mesa de al lado, confrontó a Octavio e iniciaron una discusión que llegó a los empujones, los meseros intervinieron para separarlos.
El agresivo comensal abandonó el establecimiento y se dirigió a su auto, Octavio Muciño lo siguió para solucionar el problema, pero el cliente sacó una pistola 25 ACP y le propinó un disparo en la cabeza, seguido de un tiro en el pecho y otro en el hombro.
Octavio permaneció 3 días en coma en el Hospital México-Nortemericano, producto de los impactos de bala que recibió. El 3 de junio de 1974 perdió la vida a sus 24 años de edad, marcando uno de los capítulos más desgarradores en la historia de nuestro balompié.