Durango

ARQUIDIÓCESIS DE DURANGO

Más de 500 personas participaron en peregrinación en honor a mártir duranguense

Participación. Encabezados por el Arzobispo, peregrinaron más de 500 duranguenses rumbo al templo donde fue fusilado San Mateo Correa.

Participación. Encabezados por el Arzobispo, peregrinaron más de 500 duranguenses rumbo al templo donde fue fusilado San Mateo Correa.

CLAUDIA BARRIENTOS

Más de 500 personas participaron en la 3ra. Peregrinación de la Arquidiócesis de Durango en honor de San Mateo Correa (mártir duranguense). Encabezó el recorrido de nueve kilómetros el arzobispo, Faustino Armendáriz Jiménez.

Los participantes se reunieron en el nuevo Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, para dar inicio a la peregrinación durante la madrugada del domingo, pasando por diferentes puntos de la ciudad hasta culminar en el Templo de San Mateo Correa, ubicado sobre el bulevar Enrique Carrola Antuna (antes Canelas), de la ciudad de Durango, en el preciso lugar donde fue fusilado este mártir y en donde se celebró la Santa Misa, presidida por el Arzobispo.

Durante la celebración eucarística mencionó que San Mateo Correa es un santo muy venerado en esta ciudad, "esta veneración nos mueve a nosotros a mirar su testimonio de fidelidad a Dios", dijo, y con ello llamó a los sacerdotes a seguir su ejemplo y cumplir con su deber.

Monseñor motivó a laicos y sacerdotes a fortalecer el espíritu peregrino invitándolos a participar en la próxima peregrinación en honor de San Manuel Morales partiendo de San José de Mesillas, localidad del municipio de Sombrerete, en el estado de Zacatecas.

CONMEMORACIÓN

Este 6 de febrero se conmemora la muerte de este santo mártir, mismo que nació en Tepechitlán, Zacatecas, el 23 de julio de 1866 y fuera Párroco de Valparaíso, cumpliendo fielmente las obligaciones de su sacerdocio, evangelizando y sirviendo a los más pobres.

Fue perseguido y hecho prisionero en varias ocasiones, hasta el día de su martirio, cuando lo detuvieron en Fresnillo, Zacatecas, y fue llevado a Durango, donde el general le pidió que confesara a unos presos para posteriormente ser fusilado en el campo, a las afueras de esta ciudad.

Escrito en: ARQUIDIÓCESIS DE DURANGO honor, peregrinación, Mateo, personas

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