Protocolo. No hay un acercamiento con los paisanos deportados; es necesario ofrecerles opciones para un trabajo.
En Durango capital no hay una atención adecuada para los migrantes que son deportados, no se revisa su salud o las condiciones en que regresan, ni se les brinda la posibilidad de ofrecerles un trabajo.
"Más de 370 personas están siendo deportadas a nuestro estado por mes; por eso la atención debe ser un tema prioritario", precisó el regidor José Ignacio Fuentes Medina.
Con un pronunciamiento en el Cabildo, se pretende generar un protocolo de atención al migrante en la capital, porque no se ha puesto mucha atención hasta el momento.
A pesar de que Durango es de los estados que más remesas recibe de los paisanos de Estados Unidos y también es la entidad que envía gran número de personas a trabajar, cuando regresan, nadie se preocupan por ayudarlos o incorporarlos a la vida productiva, subrayó.
"Solo mientras llega el dinero de las remesas todos estamos contentos; todos conocemos al menos a un familiar o persona que se ha ido a trabajar. Son personas que han dado mucho por la capital y es necesario reconocerlas", destacó el regidor.
Aunado a esa atención a los connacionales, es necesario que la ciudad se encuentre preparada para recibir a los migrantes de otros países, pues con el triunfo de Donald Trump se conoce el discurso fuerte contra los migrantes, resaltó Fuentes Medina.
Visores internacionales, dijo, ya han advertido que se vienen las olas importantes de personas deportadas de la Unión Americana.
Entonces, es necesario planear acciones para recibirlos cuando están de paso; se habla de olas de migrantes de Centroamérica que pretenden llegar a Estados Unidos antes del 20 de enero que toma posesión como presidente, indicó.
Sabemos que la política exterior va a ser muy rígida en ese tema, puntualizó.
EL SIGLO DE DURANGO