¿Por qué se aprecia la cúpula de una iglesia al fondo de la presa Guadalupe Victoria?

Debido al bajo nivel del agua que registra la presa Guadalupe Victoria, en el municipio de Durango, se han apreciado diversos objetos, tales como lápidas de lo que pudiera tratarse un panteón, pero ¿Qué 'esconde' la presa debajo del agua?.

Se trata de una de las presas más grandes del estado de Durango, una de las principales fuentes de almacenamiento, ha llamado la atención tras el hallazgo de algunos vestigios de lo que se cree fue un panteón. 

¿Qué está sumergido en la presa Guadalupe Victoria?

La presa Guadalupe Victoria, es una de las presas más grandes del estado de Durango, y también una de las principales fuentes de almacenamiento y ha llamado la atención tras el hallazgo de algunos vestigios de lo que se cree fue un panteón. 

En realidad, no se esconde nada, pero sí hay un pueblo al fondo.

Se trata del poblado Viejo Durazno, mismo que quedó dentro del vaso de la presa, aseguró Javier Guerrero Romero, Cronista Oficial de la ciudad de Durango.

Este poblado fue reubicado, y era una población de indios de la época fundacional de la ciudad de Durango.

Dicho pueblo se ubicaba entre El Pueblito y la cortina de la presa.

Se ha llegado a observar la cúpula de una iglesia

Este lugar contaba con una iglesia que se ha llegado a ver incluso cuando las aguas bajan demasiado.

 De manera inicial fue una misión franciscana, luego partir de fines del siglo XVIII, pasó a hacer una capilla de la parroquia de Analco, detalló Javier Guerrero.

Historia y leyenda

El Durazno es historia y leyenda. Los vecinos de esa zona, llegan a recordar que sus antepasados les tocó vivir la Guerra Cristera, pues muchos de ellos sufrieron los estragos de la lucha, a tal grado que algunos fueron asesinados en la puerta de su casa.

Este poblado, ahora conjuga sus años de existencia en historia y leyenda, pues desde los niños y jóvenes, conocer las dos leyendas más conocidas, “La Campana Encantada” y “Piedras Azules”; la primera de tiempos de la colonización y la segunda contemporánea de tres jovencitas que por desobedecer a sus madres se convirtieron en piedra en la orilla de El Tunal. Hoy, dicen que sus cantos se escuchan por las noches.