Seguridad. La intervención de las autoridades permitió evitar que se consumara algún delito y que la familia depositara dinero.
En el sistema de emergencias 911 se reportó un caso de extorsión telefónica en el municipio de Santiago Papasquiaro, en el que una mujer de 34 años de edad informó que su hijo y un amigo, ambos menores de edad, se encontraban desaparecidos e incomunicados desde hacía varias horas.
A la par, la madre del otro menor había recibido llamadas de números telefónicos desconocidos exigiéndole dinero a cambio de su rescate, por lo que elementos de la Dirección Municipal de Seguridad Pública, a través del Mando Único, atendieron el reporte acudiendo al domicilio de las víctimas.
Se trataba de un adolescente de 16 años de edad, en compañía de su amigo de la misma edad, quien recibió una llamada telefónica de un número desconocido amenazándolo con que la persona que le llamaba pertenecía a un grupo del crimen organizado y que tenía que seguir sus indicaciones, pero el adolescente rápidamente colgó; sin embargo, continuaron las llamadas pero ahora de otro número insistiendo en que tenía que escuchar sus órdenes. De lo contrario, iban a dañar a su familia, por lo que volvió a colgar.
Pero de manera insistente continuaron llamándolo hasta que el adolescente puso su teléfono celular en modo avión para evitar el hostigamiento; mientras tanto, en esos momentos ya le estaban llamando a la madre de la víctima amenazándola con que tenían a su hijo secuestrado, por lo que le pedían a cambio 50 mil pesos por su liberación. Fue cuando la madre pidió ayuda a las autoridades.
Los elementos de seguridad dieron acompañamiento a las víctimas para que evitaran contestar el teléfono por si se recibía alguna llamada del extorsionador y para interponer la denuncia en la Fiscalía General del Estado, además de tratar de ponerse en comunicación e iniciar la búsqueda de los dos jóvenes, quienes horas más tarde llegaron a sus domicilios, reportándose sanos y salvos.
Gracias a la intervención de los elementos de seguridad y que el menor de edad colgó a tiempo las llamadas, se evitó la extorsión.
