Kiosko

ITINERANTE

Sobre una colección de Margiela Artisanal

Sobre una colección de Margiela Artisanal

Sobre una colección de Margiela Artisanal

SAC-NICTÉ CALDERÓN

Lo primero que supe de Maison Margiela fue la colaboración low cost que hizo con H&M en 2012. Las piezas, minimalistas y dadaístas, se lanzaron dos años antes de que John Galliano se convirtiera en el director creativo de la firma. Este año su colección para Maison Margiela Artisanal estuvo inspirada, entre otras cosas, en las colecciones históricas que hizo para Dior a finales de los noventa, y, acompañado del maquillaje de muñeca de porcelana antigua de Pat McGrath, se convirtió en una lección de historia de la moda.

En algún tuit leí que la razón por la que muchos perdimos la cabeza al ver las imágenes del desfile es porque las semanas de la moda dejaron de lado esa cualidad performática hace tiempo: hubo algún vistazo en la colección de Alta Costura Otoño-Invierno 2020-2021 de Dior, con sus muñecas miniatura, y Jeremy Scott jugó con el significado de camp en Moschino, pero para mí esa certeza de ver arte en movimiento no existía desde los desfiles de Alexander McQueen, cuando el inglés estaba al frente de su firma.

***

Vanessa Rosales, académica colombiana, llama "fashion" a todo lo que representa la moda desde el consumismo. Yo lo interpreto también como ese saltar entre tendencias dictadas por TikTok (coquette, mob wife, lujo silencioso) como para anestesiar nuestra propia personalidad, por el miedo a ser honestos con nosotros mismos. Las colecciones de los últimos años cayeron muchísimo en ese "fashion" que Rosales -y yo- criticamos. Basta pensar en Balenciaga y el giro drástico -por supuesto, para mal- que tomó en los últimos años. Lo relaciono también con ese temor del que habla Vanessa Friedman para el New York Times, en "Why So Many People Can't Get That Galliano Show Out of Their Heads", el miedo de darse cuenta que "el dinero ha ganado", de que, envueltos en la globalización, perdimos algo esencial "y no sabemos cómo recuperarlo". (Si trasladara esto al periodismo pensaría en esas entrevistas que se publican en formato pregunta-respuesta casi en modo automático, en esas columnas que se disfrazan de crítica cuando en realidad esconden el cheque de gobierno, y un largo etcétera). Y, formada doblemente como comunicóloga y doblemente como literata, no puedo evitar pensar también en la pérdida del aura de la que hablaba Benjamin: esa experiencia de lo irrepetible en el arte que se perdió al acceder a la "reproductibilidad" técnica.

***

El desfile de Margiela Artisanal, en la Semana de la Moda de Alta Costura de París abrió con la figura de un hombre solitario caminando, encorvado, bajo un puente parisino, acompañado de la primera luna llena del año.

Sobre el desfile, María José Pérez dijo en Dmoda: "lo que realmente ha hecho que el público se quede pasmado ha sido la historia y la teatralidad que ha vuelto a traer Galliano a la pasarela, ha vuelto a construir un universo, uno que se basa, en teoría, en parte de los años veinte y en parte de los años treinta, en esos personajes nocturnos, de dudosa reputación y que sin embargo son magnéticos, oscuros, un poco perturbadores, a los que quizás no entiendes del todo pero no puedes dejar de mirar, todo esto mezclado con ese punto historicista que tanto le gusta al diseñador y con una puesta en escena que recuerda a su mejores tiempos en Dior". La reseña de Friedman fue similar: "fue suntuoso, excesivo, repleto de emociones que se transmitían a través de las telas, con modelos vampirescas, escurridizas y dispuestas a sacrificarse en la hoguera de una imaginación desbordante. Fue el tipo de espectáculo inmersivo que no se había visto en más de una década".

Mark Guiducci de Vogue escribió en Instagram que ese era el espectáculo que se nos prometió a quienes nacimos en los noventa. Sé que Galliano fue primero, pero yo llegué a la moda por McQueen y no puedo evitar pensar en él -en sus doncellas encantadas, sus personajes sacados de cuentos de Allan Poe- cada vez que vuelvo a esas imágenes del desfile de Margiela, cuando vi a Gwendoline Christie desfilar por la alfombra de la Met Gala o a Ariana Grande interpretando Into You en un look completo de la colección. Y supongo que eso es lo que amo de la moda, esa forma de crear personajes que habitan galaxias no tan distintas una de otra, la posibilidad de ir hasta lo más oscuro, de enfrentar esas cosas que a veces no queremos ver y también con las que nos divierte jugar: que no sepan si eres vampira o muñeca de porcelana o escapaste de un cuento de Poe, o todo al mismo tiempo.

X: @SNGCALDERON

Escrito en: ITINERANTE Margiela, esas, Galliano, moda

Noticias relacionadas

EL SIGLO RECIENTES

+ Más leídas de Kiosko

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas