
Protesta. La antimonumenta se colocó al terminar la marcha feminista del 8M para exigir justicia a las víctimas de violencia y resolver los feminicidios cometidos.
En el marco del 8 de marzo en Durango capital, al terminar la marcha feminista y como parte de las protestas, se colocó una antimonumenta en la Plaza IV Centenario, justo frente al Tribunal de Justicia, para pedir que se erradique la violencia de género y exigir justicia por los feminicidios registrados en la entidad.
Sobre las diferentes expresiones de protesta y daños en algunos espacios públicos, han comenzado las rehabilitaciones en las plazas, pero no se ha determinado qué pasará con la antimonumenta colocada también el 8M, que continúa intacta.
Al respecto si se va a retirar este símbolo feminista, el presidente municipal, José Antonio Ochoa Rodríguez, comentó que es algo que se está analizando.
Expresó: "Hay que verlo; la verdad, es una plaza pública que es de todos y para todos, y estamos valorando el tema".
El Alcalde aseguró que está a favor de la libertad de expresión, de opinión, de asociación y todas las expresiones que también serán tomadas en cuenta.
"Lo más importante aquí es hacer un llamado a la armonía, a la unidad, a cuidar nuestra historia, nuestras costumbres, los edificios".
Dijo que el Gobierno Municipal está en contra de cualquier tipo de violencia, pero que el camino es trabajar para eliminar la violencia en contra de las mujeres.
Apuntó que desde el municipio se ha trabajado en políticas públicas a favor de la mujer, como la inversión en el doble de presupuesto para el Instituto Municipal de la Mujer y el programa Imparables.
"Debemos de actuar ante la falta de equidad de género, un tema que es una preocupación y una prioridad", puntualizó.
Sobre el posible retiro que pudiera darse de la antimonumenta, la regidora Guadalupe de la Parra Reyes comentó: "Quitarla sería violentar el derecho a la libre expresión y mitigar la voz de las activistas".
Precisó que la antimonumenta es una expresión colectiva que representa la memoria de las víctimas.
"Existe una ley que protege este tipo de expresiones que hacen un memorial a víctimas, en este caso de violencia", subrayó.
Sería importante, dijo, revalorar la decisión, además de que es una plaza pública con más de seis mil metros cuadrados, y la antimonumenta apenas ocupa 90 centímetros cuadrados.
Destacó que hay teléfonos públicos que estorban más el paso de los peatones.
"Hay que ser cuidadosos y sensibles con cómo nos expresamos en algo que le duele a todo México, a las mujeres y a nosotros mismos, de entender por qué se puso y para qué", finalizó.