Buscan repatriar a EU a par de hermanos asesinados en Santiago Papasquiaro; ocupan casi 1 MDP
Han transcurrido once días desde aquel 27 de diciembre de 2024, fecha en que dos hombres integrantes de una misma familia, además de otro varón cercano a ellos, fueron asesinados, cuando se encontraban de visita, procedentes de Estados Unidos, en el municipio de Santiago Papasquiaro, Durango.
Los hermanos Vicente Peña Jr. y Antonio Fernández, de 38 y 44 años de edad, respectivamente, además de Jorge Eduardo Vargas Aguirre, fueron encontrados sin vida en un camino de Santiago Papasquiaro; en tanto que, un menor, de 16 años de edad, identificado como Jason, fue lesionado de gravedad.
Hoy la familia del par de hermanos, buscan la manera de trasladar sus restos mortales hasta la ciudad de Chicago, sin embargo, no es acción sencilla, y además de complicada, costosa.
Se requieren por lo menos 40 mil dólares, poco más de 800 mil pesos mexicanos, para pagar los servicios de repatriación.
En tanto que, Jorge Eduardo Vargas Aguirre, era oriundo de la misma comunidad, por lo que sus restos se quedarían en Durango.
"Lo que debió haber sido un viaje familiar y una celebración de cumpleaños, se convirtió en una pesadilla el 27 de diciembre para sus padres e hijos", señala una publicación en spotfund, sitio utilizado para recabar fondos.
Publicado por Rosa Rodríguez, aseguran que los dolientes de las víctimas están inconsolables y han pedido ayuda de la comunidad, amigos y familia, se unan a la causa y donen fondos para la repatriación del par de varones.
Hasta este siete de enero, la recaudación ha avanzado lento, con 35 donadores y aproximadamente 3 mil dólares en total, de los 40 mil necesarios.
Detienen al responsable
El pasado 7 de enero, que por medio de un comunicado de prensa, la Fiscalía General del Estado de Durango informó sobre el esclarecimiento del hecho y detención del responsable de este hecho de sangre.
Derivado de las investigaciones realizadas se logró establecer la presunta responsabilidad de Iram Uranga Armendáriz, por lo que se solicitó ante el Juez de Control la orden de aprehensión correspondiente, la cual se ejecutó el 4 de enero del 2025.
Por este hecho, fue vinculado a proceso y accedió a un procedimiento abreviado, por lo que fue sentenciado a 66 años, 7 meses y 9 días de prisión, por su responsabilidad en la comisión de los delitos de homicidio calificado y lesiones calificadas, así como al pago de una multa de 520 mil 810 pesos y la reparación del daño de 3 millones 778 mil 754 pesos.