
Espionaje: ¿Cómo opera un avión 'espía' estadounidense?
En las últimas semanas, se han incrementado los avistamientos de aeronaves estadounidenses Unidos sobrevolando en territorio mexicano, sobre todo en Sinaloa, Sonora y Durango.
Sobre estos vuelos, las autoridades en México, ante pregunta expresa de los medios de información nacionales, informaron que no contaban con información sobre ellos, aunque no descartaron que se trate de un “espionaje”.
Al respecto, la tarde de este jueves, circuló la confirmación que diera el general Gregory Guillot, jefe del Comando Norte, quien habló sobre el tema en una comparecencia en el Senado de Estados Unidos, donde reconoció la existencia de estos vuelos sobre territorio mexicano.

Pero, ¿cómo operan estos aviones “espía”?
Los aviones denominados “espías” estadounidenses operan mediante una combinación de alta tecnología, tácticas de sigilo y sensores avanzados para recopilar información de inteligencia sin ser detectado o interceptado.
Dependiendo del modelo, su operación puede variar, pero en general, sigue estos principios:
1. Plataforma de alto rendimiento
Los aviones espías están diseñados para volar a grandes altitudes, largas distancias y durante períodos prolongados sin ser detectados. Algunos ejemplos incluyen:
- U-2 Dragon Lady: Puede volar a más de 21,000 metros de altitud.
- SR-71 Blackbird (retirado): Volaba a velocidades supersónicas para evitar la interceptación.
- RQ-4 Global Hawk: Dron de gran autonomía que realiza vigilancia a altitudes superiores a 18,000 metros.
- Boeing RC-135V Rivet Joint: Se trata de un avión espía que recopila información electromagnética para apoyar a las fuerzas militares.
2. Sensores avanzados
- Cámaras de alta resolución: Pueden capturar imágenes detalladas desde grandes alturas.
- Radar de apertura sintética (SAR): Permite ver a través de las nubes y en la oscuridad.
- Sensores de inteligencia electrónica (ELINT): Interceptan señales de radar y comunicaciones enemigas.
- Sensores de inteligencia de señales (SIGINT): Capturan transmisiones de radio, datos de radar y otras emisiones electrónicas.
3. Medidas de sigilo y evasión
- Altitud extrema y velocidad: Modelos como el SR-71 eran prácticamente intocables debido a su velocidad superior a Mach 3.
- Tecnología furtiva (Stealth): Algunos modelos, como el RQ-170 Sentinel, tienen diseño sigiloso para minimizar la detección por radar.
- Contramedidas electrónicas: Sistemas para bloquear o interferir radares y misiles enemigos.
4. Operaciones autónomas y en red
- Drones espías: Como el RQ-4 Global Hawk, operan de forma remota y pueden transmitir datos en tiempo real a centros de inteligencia.
- Conectividad satelital: Permite la comunicación con el Pentágono y otros centros de comando en tiempo real.
- Coordinación con otros activos: Puede trabajar junto a satélites espías y aviones AWACS para mejorar la cobertura de inteligencia.
5. Misiones típicas
- Vigilancia sobre territorios hostiles sin necesidad de incursiones directas.
- Identificación de objetivos militares como bases, tropas y movimientos enemigos.
- Intercepción de comunicaciones para inteligencia estratégica.
- Monitoreo de pruebas nucleares y misiles en países como Corea del Norte o Irán.
En resumen, los aviones espías estadounidenses son piezas clave en la recopilación de inteligencia militar y estratégica, combinando alta tecnología, sensores avanzados y tácticas de sigilo para operar sin ser detectados.