Alcatráz y Xochipitzahua.
Nada como el agradecimiento por el enigma de estar vivos; es ante todo un deseo que en el acto mismo beneficia al que lo procura. Alrededor de las comunidades en el centro del país como son el Estado de Tlaxcala, Querétaro, municipios de Morelos como Tlayacapan, Tepoztlán e Ixcatepec celebran año con año una danza por el nacimiento de una flor con mucho significado llamada "Xochipitzahua"que en náhuatl recibe el nombre de flor pequeña o delgada , misma que crece en Puebla, Hidalgo y Veracruz, pero es en Tlayacapan , Morelos donde se festeja con gran admiración y adulación por la humildad de ser junto con la naturaleza, que es muy colorida por todas estas regiones del país.
"Tenanches" son el nombre que reciben mujeres "abuelas" que por su edad se les considera con una experiencia tal que son capaces de servir, danzar y agradecer junto con comparsas de viento, mayordomías y pueblo en general para aquellas deidades católicas que esconden veneración indígena arcaica. Las "tenanchis" como les llaman en Tlayacapan expresan una honda carga simbólica en el sentido artístico más autóctono donde el son de Xochipitzahua marca las cambios sociales, los de la naturaleza y las del ciclo agrícola (vida-muerte, soltero-casado, sequía-lluvia) conteniendo una tradición mestiza de alto nivel en su modo de orar bailando.
Es el 16 de Diciembre cuando las "tenanchis" hacen la ofrenda de flores, incienso y velas tradicionales de cera de abeja hacia la imagen del "Niño Dios", incluyendo la flor de nochebuena que es oriunda del estado de Morelos y que además presume de una belleza exótica y elemental de tierra; es así como este festejo fusiona lenguas (náhuatl y castellano) en danzas , flores y cantos que resaltan el respeto y amor que siente el indígena por la mujer.