¿Qué originó los incendios en California? Esto es lo que sabemos

El estado de California enfrenta nuevamente una de las crisis ambientales más devastadoras de su historia. En los primeros días del 2025, incendios forestales de gran magnitud han arrasado más de 1,000 estructuras, dejando al menos cinco personas fallecidas y cientos de evacuados. 

Las imágenes de llamas incontrolables en áreas como Pasadena, Malibú y otras zonas del condado de Los Ángeles han dado la vuelta al mundo, pero...

¿Qué originó esta catástrofe?

Las investigaciones preliminares señalan que una combinación de factores climáticos y humanos contribuyó al inicio y la rápida propagación de los incendios.

• Vientos de Santa Ana: Estos vientos, característicos del invierno en California, alcanzaron velocidades de hasta 80 km/h, avivando las llamas y dificultando las labores de contención.
• Sequía prolongada: Aunque han ocurrido algunas lluvias en el estado, las condiciones de sequía extrema han dejado la vegetación seca y altamente inflamable, convirtiéndola en combustible perfecto para los incendios.
• Altas temperaturas inusuales: El cambio climático ha contribuido a temperaturas más cálidas en el sur de California, creando un ambiente propicio para la ignición.

Más de 2,000 bomberos trabajan día y noche para contener las llamas, mientras se emiten órdenes de evacuación en las zonas más afectadas. La tarea no ha sido sencilla, ya que los fuertes vientos cambian constantemente la dirección del fuego, poniendo en riesgo a más comunidades.

Carlos Vela fue uno de los afectados

El futbolista mexicano y estrella del LAFC en la MLS, ha sido una de las víctimas de dichos incendios californianos. Según trascendió, el jugador perdió su casa ubicada en el condado de Malibú debido al fuego incontrolable que ha arrasado con miles de estructuras en la región. La noticia fue compartida por su esposa, Saioa Cañibano, a través de sus redes sociales, donde expresó la tristeza de la familia ante esta tragedia, no obstante, ninguno de sus allegados salió herido.

Los incendios de 2025 han demostrado una vez más la fragilidad de los ecosistemas ante las condiciones extremas y la intervención humana. Ahora, el estado se enfrenta no solo a apagar las llamas, sino también a reflexionar sobre las medidas necesarias para evitar que tragedias como esta se repitan.